Ollas comunes no tienen permiso para traer carne desde Santiago
Los viajes entre regiones están prohibidos para comunas en las fases 1 y 2. Si se trasladan a la capital corren riesgo de ser multados nuevamente. Tampoco pueden funcionar en los días de cuarentena.
El sumario sanitario que le cursaron a Manuel Villarroel Vielman, vecino la Villa Las Loicas, quien acompañó a la activista social Ana Becerra a buscar 100 kilos de carne molida y pollo para las ollas comunes, desató otro conflicto para la organización de los comedores comunitarios de la provincia.
Los representantes de las 16 ollas que funcionan en la zona una vez a la semana viajaban a Santiago para recibir el aporte proteico que requiere la alimentación de los más necesitados por la crisis económica que desencadenó la pandemia del covid.
Con el sumario sanitario que le cursaron a Manuel Villarroel se enteraron que los viajes interregional entre comunas que están en las fases 1 y 2 del Plan Paso a Paso están prohibidos.
Durante la mañana del jueves, dirigentes de los comedores se reunieron con personal de la oficina provincial de la Secretaría Regional Ministerial de Salud. En la cita desarrollada en la torre Bioceánica, además de zanjar el pago de un millón y medio de pesos de multa por viajar sin pasaporte sanitario, sin permiso único colectivo y sin salvoconducto de desplazamiento los dirigentes se enteraron que no podrán seguir con esta actividad.
Primero Manuel Villarroel contó que "me sacaron el sumario sanitario, gracias a Dios, pero no tenemos permisos para ir a buscar la carne para las ollas comunes, porque no nos podemos mover para generar la ayuda", contó el vecino que por un afán solidario se enfrascó en este conflicto.
De acuerdo a la versión de los dirigentes se podría obtener un permiso especial para el desplazamiento, pero es responsabilidad del nivel regional de la Seremi de Salud.
Golpe duro
Ana Barrera explicó que "para salir de la región solo puede ser para un funeral, una mudanza o una hora médica. No podemos salir por ninguna otra razón de la provincia".
La información de los funcionarios de la Seremi fue un golpe para los dirigentes de las ollas de la comuna y la provincia . "Esas son las reglas y ahora no podemos viajar. Le tenemos que mandar una carta a la Seremi pidiéndole por favor que nos deje ir a Santiago. No es nada seguro", agregó Ana Barrera.
Incluso en la reunión se enteraron que las ollas comunes no tienen autorización para atender los días en que rige la cuarentena. "Las ollas funcionan de lunes a domingo, la gente tiene que comer todos los días, pero nos dicen que no podemos funcionar", cuestionó Ana Barrera sobre las medidas que les impone la autoridad sanitaria.
No solo las ollas de San Antonio tendrán dificultades. "En Cartagena funciona una olla hace más de un año. La Anita (Barrera) es la única que nos ayuda con las proteínas. La gente coopera con cosas, pero no con carne. Ningún organismo oficial ayuda, porque no estamos constituidos formalmente. Esta olla nació de la necesidad y atendemos a unas 100 personas diariamente", expuso Pamela Álvarez, sobre el drama que enfrentan por no contar con permisos.
16 ollas comunes funcionan en la provincia de San Antonio.