Mónica Jorquera Escobar
En dos semanas se cumplirá un año desde que encontraron sin vida a Hugo Morales Abarca (59). Al vecino de Bellavista, conocido como "Wirasacha", lo hallaron muerto luego de 14 días en que se mantuvo desaparecido. Y hoy siguen las dudas sobre su deceso.
El hallazgo del cuerpo en una quebrada en Pelancura ocurrió el 4 de julio pasado, luego de una ardua búsqueda encabezada por la familia del comerciante, quien vendía hierbas medicinales y la pomada que le dio su apodo en el centro de Cartagena.
Cuando apareció el cuerpo, sus seres queridos de inmediato sospecharon que algo andaba mal, pues se encontraba vestido con ropa ajena y no tenía su bastón, el que necesitaba para caminar.
En ese momento, la indagación policial indicó que no hubo participación de terceras personas en el deceso y la autopsia del Servicio Médico Legal (SML) reveló que murió de un infarto fulminante.
Pese a ello, hoy la familia pide que se vuelva a investigar el caso y que se exhume el cuerpo del "Wirasacha".
Querella
La semana pasada los seres queridos del occiso presentaron una querella criminal en contra de quienes resulten responsables por el delito de homicidio cometido en contra del vecino de la toma "Las Loicas" de Bellavista.
En el documento judicial expresan que mantienen una serie de antecedentes que demostrarían que Hugo Morales estuvo compartiendo con un individuo justo antes de desaparecer.
"La teoría (de la familia) es que el día jueves 18 de junio de 2020, estando Hugo Morales pagado (de su pensión), quiso (el acusado) quitarle el dinero y lo llevó a su casa a tomar unos tragos. Ahí hubo una pelea porque el sujeto no encontraba el dinero de la pensión de Hugo y producto de eso, habiendo variados golpes , provocó tal nerviosismo en e l Huguito que éste terminó con una muerte repentina (el infarto que indica el SML) y falleció en la casa (del individuo) y este no supo qué hacer con el muerto", dice en el documento.
Se agrega que cuentan con pruebas sobre que el acusado acudió hasta donde un familiar de Morales Abarca el 19 de junio, encontrándose "nervioso, agitado y exaltado", diciendo que había tomado unos tragos con "Wirasacha" y que después "desapareció".
"Llegó diciendo que Hugo había desaparecido y que no estaba en su casa. Probablemente ya lo había hecho desaparecer", se redactó en la querella.
Los cercanos al occiso manifestaron que "nosotros queremos saber la verdad, porque Hugo no murió en esa quebrado, lo llevaron hasta allá".
Indagar
El abogado particular de la familia solicita que el tribunal dictamine "una orden amplia de investigar a la Brigada de Homicidios de San Antonio sobre los hechos denunciados".
Piden también que se decrete "una orden mediante oficio al Instituto Médico Legal o SML para recabar la autopsia practicada a Hugo Morales Abarca (…), ya que habría que practicar una exhumación para realizar otra autopsia si no aparecen las lesiones sufridas por el occiso, no siendo suficiente (el resultado de) infarto agudo al miocardio causado a la víctima".
El Juzgado de Garantía de San Antonio declaró admisible la querella criminal, ordenando colocar en antecedente al Ministerio Público sobre las diligencias solicitadas.
59 años tenía el comerciante que fue encontrado sin vida en una quebrada de Pelancura el año pasado.