El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, pronosticó una rotunda victoria de la selección de su país por 5-0 sobre Argentina, en la final de la Copa América que se disputará mañana en el estadio Maracaná de Río de Janeiro.

"La única rivalidad entre nosotros tendrá lugar el próximo sábado en el Maracaná. Voy a adelantar el resultado: 5-0", vaticinó entre risas el Mandatario y mientras hacía la señal con la mano de los cinco goles, dirigiéndose a su homólogo argentino, Alberto Fernández, en la cumbre del Mercosur.

La Canarinha y la Albiceleste, lideradas por Neymar y Lionel Messi, respectivamente, lucharán por ser el nuevo campeón de una Copa América que ha estado envuelta en una controversia por celebrarse en Brasil con la pandemia del coronavirus sin controlar.

Además, tras la idea de la Conmebol de que la final se jugará con público en el Maracaná, todo quedó en nada. La Prefectura local negó la opción de que cada país tuviera a disposición dos mil entradas, las cuales no iban a ser vendidas.

Los tickets solo eran destinados a familiares y amigos del plantel, requiriendo el cumplimiento de protocolos como PCR negativos y el uso de mascarilla. Quien sí estará es Gianni Infantino, presidente de Fifa, quien llegará pocas horas antes del duelo.

El defensa español Sergio Ramos dijo ayer, tras hacerse oficial su fichaje de dos temporadas por el Paris Saint-Germain, que cree que puede aportar "experiencia y madurez" al club francés, con el que firmó hasta el 30 de junio de 2023. "Soy trabajador, me gusta ser constante y tener sentido del sacrificio. Eso es lo que he logrado a lo largo de mi carrera y trataré de dar mi mejor nivel para ayudar y ganar, que es difícil, pero tenemos que estar todos unidos y remando en la misma dirección", explicó en una entrevista al canal oficial del club. El volante italiano Marco Verratti agregó que "Ramos lo ganó todo en su carrera y nos va a ayudar. Me alegra que haya elegido el proyecto del PSG".

Nicolás Labra G.

Un fuerte golpe dio la organización de Tokio a los atletas y fanáticos que esperaban asistir a las competencias de los Juegos Olímpicos, ya que dio marcha atrás a su primera decisión, donde se consideró recibir hasta 10.000 espectadores en cada recinto, y ahora será sin público debido al aumento de los contagios de coronavirus en la capital.

La presidenta del comité organizador, Seiko Hashimoto, dijo que la medida se tomó porque "es necesario enviar un mensaje fuerte y claro" y que eso implicó "tomar una decisión difícil". "Lo lamento por los que compraron boletos y por todos en las áreas locales", agregó Hashimoto.

Tamayo Marukawa, ministra a cargo de los juegos, reveló la decisión, que en la reunión contempló a los organizadores, representantes de los comités olímpicos y paralímpicos internacionales. Además, la restricción se condice con lo que había anunciado el primer ministro Yoshihide Suga con un nuevo estado de emergencia que abarcará desde el 12 de julio al 22 de agosto, lo que incluye el periodo completo de la cita.

El Comité Olímpico Internacional (COI) y el Comité Paralímpico Internacional (CPI) lanzaron una nota en conjunto donde apoyan la decisión ya que la "medida está destinada a suprimir el flujo de personas para prevenir la propagación de la infección ahora, porque el número de casos confirmados de Covid-19 sigue siendo alto".

En caso que los contagios bajen, las cinco partes implicadas -organizadores, gobierno metropolitano, el gobierno japonés junto al COI y el CPI- se volverán a reunir para analizar la factibilidad de que asistan espectadores.

Por otro lado, la situación de los Juegos Paralímpicos recién se resolverá el viernes 16, una semana antes de la Ceremonia inaugural.

"Ahora es necesario tomar una decisión basada en la situación de infección prevaleciente en ese momento. El COI y el IPC, respetando esta decisión, la apoyan en aras de unos Juegos seguros para todos. Al mismo tiempo, las cinco partes lamentan profundamente por los atletas y por los espectadores que esta medida haya tenido que implementarse", cerraron.

En Japón se reportaron el miércoles 2.180 casos, 920 de ellos en Tokio. El 15% de la población tiene las dos dosis.