Profesora de Lenguaje llegó a la provincia para desarrollar su carrera y un negocio de moda
Carolina Contreras vive hace cuatro años en Santo Domingo. Ahora compatibiliza su tiempo con su emprendimiento de prendas, calzado y accesorios de mujer.
Acostumbrada a los cambios de ciudad, Carolina Contreras Cáceres (41) hace cuatro años llegó a vivir desde Talagante a la comuna de Santo Domingo.
Oriunda de Talcahuano, su vida profesional la llevó en más de una ocasión a cambiar su residencia.
"Llevo cuatro años viviendo en Santo Domingo y trabajando en San Antonio y siento que ha sido como volver a mis raíces, porque es muy similar a Talcahuano, pese a que de todos modos uno extraña a su familia", comenta Carolina Contreras.
-¿San Antonio es muy distinto a Talagante?
-Si nos referimos al clima, sí, partiendo porque esta es una ciudad puerto, al igual que Talcahuano, entonces es más húmedo y no tan caluroso como es Talagante, entonces por lo mismo yo creo que me acostumbré.
Vida profesional
Carolina Contreras estudió pedagogía en la Universidad de Concepción, por lo que, durante su periodo universitario, no tuvo que dejar su natal Talcahuano.
Sin embargo, asegura que, al principio, no estaba del todo segura de lo que quería hacer con su vida en el futuro.
"No estaba muy convencida de la pedagogía la verdad, siento que estudié pedagogía en Lenguaje, porque no me gustaba tanto el área de las Ciencias y los números, pero pasado el tiempo en la carrera, siento que el panorama cambió", detalla.
-¿Pensaba ejercer su profesión?
-La verdad no, no podría decir que la vocación me brotaba por los poros, porque la verdad, no era así. Me acuerdo que me iba bien y en el segundo semestre del primer año, me di cuenta de lo mucho que me apasionaba enseñar, porque no lo sentía.
-¿Pensó en estudiar otra carrera?
-Lo que pasa es que siempre estuve como muy ligada a los negocios, pero mi familia siempre me inculcó que debía obtener un título profesional y eso hice, pero nunca pensé estudiar algo relacionado a los negocios. Al final fue la pedagogía y terminó por enamorarme.
Un trabajo
Carolina cree que gracias a las formas que su madre buscaba para llevar más ingresos al hogar, es que alguna vez se ligó al mundo de los negocios.
Además nunca lo vio como una alternativa de carrera profesional, sobre todo luego de enamorarse de la pedagogía, carrera que aún ejerce.
"Me acuerdo que mi mamá cosía o hacía queques y tortas para tener un poco más de dinero, entonces fue algo que siempre estuvo en mí. Mis papás querían que yo estudiara algo más y creo que fue lo mejor que me pudo pasar", manifiesta.
-¿Cómo y cuándo se fue de Talcahuano?
-Cuando egresé no sabía si iba a ejercer inmediatamente, porque no tenía idea de si encontraría trabajo. Para mí Talagante no era una ciudad nueva, porque mi familia es de allá y cuando chica todos los veranos nos íbamos de vacaciones y fue allá donde se dio el primer trabajo.
"Siento que la oportunidad de tener trabajo se dio muy rápido y fue en Talagante, yo sabía que era un cambio grande, pero pensé que tenía que arriesgarme para crecer profesionalmente y siento que fue bueno, porque eso mismo me abrió puertas, para nuevos desafíos", añade.
-¿Fue un cambio muy complicado?
-Lo que pasa es que igual era chica, pero mi familia vive allá entonces eso me ayudó mucho. Además, mi hermana también hizo su vida allá, por lo que igual estuve acompañada. Fueron 14 años los que estuve en Talagante y siento que crecí mucho como persona y como profesional.
Nuevos desafíos
En los 14 años de trabajo de Carolina en un colegio en Talagante asumió nuevos desafíos en su carrera docente.
De esta manera se convirtió en jefa de la Unidad Técnico Pedagógica (UTP) de su lugar de trabajo y eso le abrió las puertas para otras opciones laborales, que se presentaron en la provincia de San Antonio.
"Aún trabajaba en Talagante cuando se me ofreció la posibilidad de ser directora en un colegio de San Antonio. Fue un escenario al que nunca pensé que me enfrentaría, pero acepté, con toda la convicción del mundo y desde ese momento que estoy aquí", cuenta al respecto.
-¿Fue complejo volver a cambiar de ciudad?
-Yo no tengo hijos, solo tengo pareja, entonces creo que estar en ese escenario, en que no hay que pensar en el colegio de los niños, si se acostumbrarán o qué pasará con sus amigos, es algo que me beneficia mucho. Ya había hecho un cambio grande, hacerlo otra vez no era imposible y así fue.
Pandemia
Desde febrero de 2018 que esta profesora vive en Santo Domingo y se desempeña como directora del colegio Juan Pablo II de San Antonio.
Asegura que su trabajo, como cualquier otro, ha resultado un desafío y no está exento de complicaciones.
"Creo que las complicaciones se pueden dar en todo colegio, pero sin importar si hay un buen o mal líder, si no hay un equipo detrás que ayuda y entrega toda la confianza, no se es nada y yo tengo la suerte de tener un excelente equipo conmigo", sostiene.
-¿Cómo ha sido el trabajo en la pandemia?
-La verdad ha sido difícil, sobre todo por el grado de vulnerabilidad que tiene nuestro colegio, pero tratamos de hacer todos los esfuerzos que están dentro de nuestras manos para seguir entregándoles la educación de calidad que todo niño se merece.
"Creo que también la clave está en ser sensatos y conocer la realidad de nuestros niños. A algunas familias les cuesta llegar a fin de mes o pagar un plan de internet y por lo mismo las clases a veces se complican, pero tratamos de encontrar las mejores soluciones", añade.
Negocios
Desde que vivía en Talcahuano, también en Talagante y ahora en la provincia de San Antonio, Carolina ha intentado combinar su trabajo profesional con un emprendimiento de ropa de mujer.
Caro Contreras Moda y Accesorios, ofrece a través de redes sociales como Facebook e Instagram (carocontrerasmodayaccesorios) distintas prendas para mujer, además de bolsos y calzado, priorizando la confección nacional.
"Ofrezco zapatos de confección peruana y también productos de confección nacional, de alguna forma convirtiéndome en un emprendimiento que se ayuda de otros y eso la gente de acá lo ha tomado muy bien, me ha gustado atreverme otra vez, pero acá", expone.
-¿Lo había hecho antes en otras ciudades?
-Claro, lo hice en Talcahuano muy poco, pero más firme fue en Talagante y en Santo Domingo junto con San Antonio. Mucho me sirvió haber sido parte del Emporio de Emprendedores durante gran parte del verano en Costanera San Antonio, entonces la gente me conoció un poco más.
Además, ahora que han pasado los meses y debido a los avances de fases en la pandemia, Carolina habilitó un espacio en su casa que puede ser visitado con previa coordinación.
"Lo que más trato de hacer es separar el trabajo de mi emprendimiento, una cosa no me quita tiempo de otra, de hecho, nunca hago repartos en mi horario del colegio, porque eso no me gusta. Compatibilizo ambas cosas, pero no las mezclo", manifiesta.
"Llevo cuatro años viviendo en Santo Domingo y trabajando en San Antonio. Ha sido como volver a mis raíces, porque es muy similar a Talcahuano",
Carolina Contreras
"Aún trabajaba en Talagante cuando se me ofreció la posibilidad de ser directora en un colegio de San Antonio",
Carolina Contreras
"La clave está en ser sensatos y conocer la realidad de nuestros niños. A algunas familias les cuesta llegar a fin de mes y pagar un plan de internet. Las clases a veces se complican",
Carolina Contreras.