la cocina de don tinto
Como cuando solo había repollo
Para los que hace rato ya pasamos de las cuatro décadas nuestros recuerdos de comida de invierno cuando éramos niños están necesariamente ligados al repollo. Sí, porque además del apio, la acelga y alguna lechuga por ahí; prácticamente la única posibilidad de ensalada para los meses fríos estaba radicada en el repollo verde. Porque el morado, pocazo se veía. Así las cosas, entre apio palta, puré y tortilla de acelga más la clásica ensalada de repollo pasábamos los meses más fríos -y lluviosos- del año.
Pero ahora las cosas han cambiado, las alternativas de vegetales para el invierno son mucho más variadas y -al menos acá en Santiago- casi nunca llueve. Sin embargo, a lo que de verdad me quiero referir en estas líneas es a que a pesar de la abundancia de hoy el repollo aún puede ser una alternativa en la cocina. Porque ojo, no solo de ensalada vive esta hortaliza. Vamos viendo. Si tenemos repollo morado, lo podemos cocinar en una sartén con un poco de tocino y manzana verde y tendremos un espectacular acompañamiento caliente para las chuletas. Se puede cocinar al vapor y luego aliñar con un poquito de aceite de oliva, sal y limón para acompañar un trozo de pescado frito. Se puede encurtir en vinagre para luego usarlos al servir un plato de legumbres. Y claro, también se puede usar crudo, como toda la vida, picado bien fino y mezclado con pepino y zanahoria. Aliñado, obviamente con un buen vinagre y acompañando un trozo de pollo asado.
Como ven, las opciones para usar el repollo son varias. Por lo mismo, y tomando en consideración que por estas semanas se consigue muy barato, yo me aplicaría con alguna receta en base a esta hortaliza. Por ejemplo, la que viene a continuación.
por álvaro peralta / @dontinto