Mamá e hija emprendieron con una tienda saludable que trajo de vuelta los productos a granel
El objetivo del negocio familiar de Anette Fuentes y Lissette Paz Carvajal es vender sano, a precio justo, con cantidades responsables y evitando los residuos innecesarios.
La alimentación saludable y el cuidado del medio han sido una premisa en la vida sana que lleva Anette Fuentes Villalobos desde la adolescencia. Ese estilo lo traspasó a toda su familia y ahora quiere transmitirlo a los clientes que llegan a la tienda ecológica (Ecoemporio Bamboo) que instaló en el sector de Colinas del Mar, en la parte alta de la ciudad, junto a su hija Lissette Paz Carvajal.
Legumbres, harinas, granos, frutos secos, especies, aceite, vinagre y hasta detergente ecológico para la ropa y la loza ofrecen a granel en el negocio (www.ecoemporiobamboo.cl / Instagram @EcoEmporioBamboo), donde venden productos saludables, ciento por ciento naturales e incentivan el consumo responsable de alimentos para no generar residuos innecesarios.
Un estilo de vida
"Más que una tienda, Ecoemporio Bamboo es un estilo de vida. Nuestro enfoque principal es crear conciencia y mantener una relación amigable con nuestro planeta", señala Anette Fuentes (60 años), fundadora del emprendimiento.
-¿Cómo nace la idea de una tienda con productos saludables y amigables medioambientalmente?
-Anette: En septiembre de 2019 abrí este negocio en el Panorámico (centro comercial de la comuna de Providencia) en Santiago. En octubre vino el estallido social y después la pandemia, la tuve que cerrar y volver a San Antonio. En diciembre de 2020 decidimos abrirla acá y descentralizar un poco el comercio de este tipo de alimentación, por lo mismo elegimos Colinas del Mar (calle Armando Pino 1282).
Ecologica
Desde los 14 años Anette Fuentes es vegetariana. Asegura que siempre le ha gustado la alimentación y la vida saludable, un estilo la traspasó también a su familia. "Cuando nadie era vegetariano, yo era un bicho raro. Hace muchos años siembro mis propias verduras, hago compostaje y siempre he estado preocupada del medio ambiente. Queremos, a través de esta tienda ecológica, ayudar y educar a que las personas tengan un consumo responsable, evitando generar más residuos de los necesarios, que tengan opciones de alimentación saludable, que puedan consumir súper alimentos a precios justos y cuidando el planeta", afirma Anette.
Su hija Lissette (36 años) confirma que el sentido de la tienda se basa en tres elementos fundamentales: vender productos saludables, a precios justos y haciéndonos cargo de no generar basura innecesaria.
Lissette es ingeniera civil biomédica y dejó su trabajo en la clínica Santa María en la capital para acompañar a su madre en este emprendimiento; también para atender su embarazo de actuales seis meses. "Mi vida en Santiago era muy absorbente y por el tema de la pandemia me decidí y volví a mi natal San Antonio", indica.
A granel
A juicio de Lissette, la compra a granel permite reducir plástico y optar por envases amigables con el medio ambiente, así como adquirir la cantidad justa de un producto y de paso ahorrar.
"Incentivamos el consumo a granel y responsable y la disminución de residuos, por eso les pedimos a nuestros clientes que traigan sus propios envases para llevar el detergente líquido, el suavizante, el vinagre y el aceite. Queremos que se vuelva un hábito, aunque también vendemos botellas de vidrio para aquellos que aún no adquieren la costumbre", cuenta la hija.
"Las legumbres, granos y frutos secos los entregamos en bolsas de maíz que son compostables, es decir se convierten en abono orgánico. Los paquetes de alimentos tradicionales tienen una vida muy corta y constituyen un excesivo porcentaje de nuestros residuos. Nosotros al menos evitamos eso", manifiesta Lissette.
Su madre añade que "nos hace vibrar ver cómo día a día las personas que llegan a la tienda se emocionan por tener la opción de comprar productos que les permite reducir el consumo de envases de un solo uso, alimentos sin preservantes y sin maltrato animal. Creemos fielmente en el comercio justo y que productos de calidad deben estar al alcance de todos".
Diplomado
Anette es oriunda de Linares, se vino a vivir con un hermano a San Antonio y terminó la enseñanza media en Llolleo. "Aquí conocí a un colega de mi hermano, los dos estaban recién titulados de dentista. Me quedé acá, nos casamos, llevamos 40 años de matrimonio, tenemos cuatro hijos, tres nietas y un nieto en camino".
A Anette le gusta tanto la vida sana que no se cansa de estudiar acerca de todo lo que beneficie a la salud y el medio ambiente. Hace un par de años hizo un diplomado en Ecodiseño, que tiene que ver con envases y embalajes, también con la Ley Rep (Responsabilidad Extendida del Productor).
Asimismo, fue directora del Consejo Ecológico Comunal de San Antonio, desde donde organizó, durante dos años seguidos, la feria de agroecología con expositores de distintas regiones que presentaban sus productos relacionados con medicina natural y temas de medio ambiente. También pertenece a la ONG SurCrea y a la Asociación Agricultora Biodinámica de Chile.
"Siempre he tenido relación con temas medioambientales. Por lo mismo, ahora queremos transmitir una esencia saludable y natural. Además de vender productos que hacen bien, en la decoración usamos mucha madera, nada empaquetado ni artificial. Si hasta nos preocupamos de que los snacks que vendemos no tengan ningún sello", señala la emprendedora.
Producto local
Lissette explica que también quieren ser una vitrina de productos de la zona, ayudar a productores locales y están en esa búsqueda. "Nos ha costado porque no hay variedad de productores de la provincia que tengan resolución sanitaria. En cosmetología natural estamos trabajando con unas chicas de Melipilla, y otra niña de Viña del Mar nos provee de chocolates, además de toallas higiénicas y pétalos desmaquillantes reutilizables; un artesano de Cantera nos provee de joyas artesanales con diseños exclusivos y de excelente calidad".
Agrega que tampoco han podido encontrar muchos proveedores que utilicen envases reutilizables o que sean compostables. "Hay productos que sí o sí vienen en plástico como el queso. En esos casos, les pedimos a los clientes que nos traigan el plástico de vuelta, tenemos contenedores para ello, luego nosotros lo llevamos a los puntos limpios", asegura Lissette.
Anette reconoce que "estamos llegando a un punto de no retorno y aunque no es el fin del mundo, el planeta ya nunca más será tal y como lo conocemos, y debemos pensar en qué estamos dejando para las nuevas generaciones".
En un futuro esperan poder dar clases de cocina saludable. "Tengo otra hija que está estudiando técnico en alimentos y nutrición, ella es vegetariana y tiene un emprendimiento de alimentación saludable para veganos, diabéticos y celiacos. Son unas preparaciones maravillosas (@duendecitos_y_hadas), y ella es la que haría las clases. Queremos que la gente sepa que no es complicado cocinar alimentos saludables y que es fácil llevar una dieta equilibrada y rica", afirma Anette.
¿Por qué le pusieron ese nombre a la tienda?
-Anette: Nuestro nombre, Ecoemporio Bamboo, nos representa en su totalidad. Eco por lo ecológico, económico y, tal vez, por la repetición del sonido. De manera más abstracta podríamos decir cómo hacemos vibrar a las personas. Bamboo es una de las plantas que más rápido crece anualmente sin causar degradación de suelo, además en el Feng shui, representa honestidad.
"Cuando nadie era vegetariano, yo era un bicho raro. Hace muchos años siembro mis propias verduras, hago compostaje y siempre he estado preocupada del medio ambiente",
Anette Fuentes
"Creemos fielmente en el comercio justo y que productos de calidad deben estar al alcance de todos",
Anette Fuentes