Mónica Jorquera Escobar
Decenas de personas llegaron ayer hasta el sector de Las Lomas, en Llolleo, para despedir a su amigo y vecino. Los deudos se "tomaron" el pasaje Puerto Williams para dar el último adiós a Sergio Andrés Pereira Jeria (37), quien falleció trágicamente luego de ser arrollado por un chofer que escapó del sitio de accidente.
La noche del viernes pasado Sergio Pereira viajó desde Santiago a San Antonio, pues había conseguido un trabajo como maestro pintor en la Región Metropolitana. Se bajó del bus en el Cruce de Cartagena para esperar a un amigo que lo iría a buscar y lo llevaría a su casa de Llolleo. A las 21 horas, su ser querido llegó por él y no lo encontró.
"Quedaron de juntarse allá en el cruce porque tomó un bus para la costa. Pero no estaba en el lugar y no contestaba el teléfono. Ahí unas personas dijeron que hubo un atropello. Era mi amigo y compadre al que habían atropellado. Fue a parar a una zanja de lo fuerte que lo golpeó el vehículo", expresó Andrés Gálvez aún impactado por la tragedia.
La misma noche del viernes el trabajador ingresó al hospital Claudio Vicuña en estado crítico de salud, donde finalmente falleció producto de las severas lesiones que mantenía en todo el cuerpo.
"Estaba quebrado entero, él era maceteado y aun así el choque lo tiró a veinte metros de distancia, se le quebró hasta un espejo al auto. Y el chofer no paró, siguió adelante, sin ayudarlo", narró Gálvez.
Efectivamente, esa noche el conductor del automóvil se marchó del sitio del suceso, sin ser detenido. Hasta ayer no había ninguna persona formalizada por este hecho.
"Queremos justicia, que esto se investigue a fondo, porque nadie nos da una respuesta. Queremos que ese chofer que mató a mi compadre responda ante la justicia, porque más encima se arrancó, dejando a una persona moribunda en la calle", expresó Gálvez lleno de dolor por la partida de su amigo.
Funeral
Ayer se llevó cabo el funeral del acérrimo hincha de Colo Colo. Entre banderas del club albo, flores y aplausos, los deudos sacaron el féretro de la que fue su casa, para luego efectuar una caravana que contó con cerca de un centenar de vehículos que se dirigieron al cementerio Parroquial de San Antonio.
Con cánticos del club de sus amores, lo despidieron por última vez, a la espera de que el culpable responda. "Era alguien a quien todos queríamos mucho, nacido y criado en Las Lomas, todavía no podemos creer que no está con nosotros", lamentó un amigo del fallecido.
21.00 horas del viernes pasado ocurrió el atropello en el Cruce de Cartagena. Víctima falleció en el hospital.
37 años tenía el maestro pintor de Llolleo que perdió la vida producto de una serie de graves lesiones.