Mónica Jorquera Escobar

Cuando la dueña de una joyería se encontraba en horario de colación, dos antisociales encapuchados irrumpieron en el local del centro de Llolleo para asaltarla.

La locataria, junto a sus dos hijas, estaban dentro del negocio ubicado en la Galería Sevilla, en avenida Los Aromos, cuando los asaltantes abrieron la puerta e ingresaron apuntándolas con pistolas.

"Nos dijeron 'quédense calladas o les disparamos'. Uno de ellos abrió la puerta corredera de la vitrina y empezaron a sacar todas las joyas, las que iban echando en mochilas, mientras nos seguían diciendo que no nos moviéramos", narró Juana Farías, dueña de la joyería "Maitte".

-¿Estaban los dos armados?

-Sí, lo dos tenían pistolas y como el local es pequeño, los teníamos encima nuestro con las pistolas. Yo traté de mantener la calma, les pedía que no nos hicieran nada y que no era necesario que me rompieran todo el local.

-¿Cómo los describiría?

-Eran los dos delgados y altos, de unos 40 años creo yo. Aunque no les vi la cara se notaba que no eran jóvenes. Eran muy violentos.

El atraco ocurrió a las 3.25 horas de ayer y para antes de las 3.30 los antisociales ya habían escapado con un botín consistente en pulseras y anillos de plata con oro, el que fue avaluado por la víctima en 2 millones de pesos.

Al tratarse de una galería, otros comerciantes del primer piso advirtieron lo que estaba pasando e intentaron repeler el atraco. "Una vecina empezó a gritarles que los había visto e incluso uno de los delincuentes le apuntó, haciendo el gesto como que le iba a disparar, gracias a Dios no lo hizo. Por los gritos decidieron irse, porque estaban dispuestos a llevarse todo del local, pero alcanzaron a llevarse solo lo de la vitrina", aportó Farías.

Lamentó además que debido a que se acerca Navidad "teníamos los estantes con mucha mercadería, estaban llenos porque en estas fechas se vende más, quizás al verlas así de llenita los sujetos se tentaron".

Además, la dueña cree que los dos encapuchados estaban coordinados con un tercer individuo, ya que al salir de la galería con las joyas, los estaban esperando en un auto negro Nissan V16.

Recuperarse

Las víctimas del atraco ayer se encontraban aún en shock debido al violento asalto. "Todavía no caemos en cuenta de lo que vivimos, que nos encañonaron, que nos intimidaron. No sé cómo se puede seguir trabajando así, con la inseguridad y miedo, pero hay que salir adelante, no nos dejaremos vencer", analizó la comerciante del local número 317 de la galería, el que tiene hace seis años.

Juana Farías cuenta que el año pasado, en agosto, unos desconocidos ingresaron a la joyería para robar, delito del cual recién se estaba recuperando.

"Ahora había invertido $2 millones para la Navidad y estos delincuentes, en menos de tres minutos, me quitaron todo por lo que yo había trabajado. Da impotencia que ellos anden felices y uno queda con las deudas y con el daño sicológico que algo así trae consigo", aseguró.

Eso sí dijo que pese a lo sucedido no cerrará la joyería, puesto que debe reponerse y recuperar la inversión. "Le digo a mis clientas que tengo de hace años que seguiré adelante, que quizás ya no traeré toda la mercadería para el local, pero que me escriban y yo les tendré lo que buscan, porque en este momento tengo que seguir trabajando, no rendirme".

Carabineros de la Subcomisaría de Llolleo acogieron la denuncia la tarde de ayer y más tarde personal de la Sección de Investigación Policial (SIP) de San Antonio efectuó diligencias en el sitio del suceso, como la toma de huellas dactilares.

Desde la policía informaron que, hasta el cierre de esta edición, aún no había detenidos por este caso.

"Todavía no caemos en cuenta de lo que vivimos, que nos encañonaron, que nos intimidaron. No sé cómo se puede seguir trabajando así",

Juana Farías,, comerciante

3.25 horas de ayer ocurrió el atraco en la joyería ubicada en una galería de avenida Los Aromos.

3 minutos tardaron los dos delincuentes en sustraer todas las joyas que había en la vitrina.