Nicolás Labra G.
Primer set para Novak Djokovic. El juez Anthony Kelly, del Tribunal del Circuito Federal de Melbourne, concedió la razón a la defensa del número uno del ATP y ordenó al gobierno australiano liberar a Djokovic del hotel de tránsito para inmigrantes en el que se encontraba desde el jueves, devolverle su pasaporte y todos sus efectos personales, además de pagar los costos legales.
La decisión, en primera instancia, le permitirá al 20 veces ganador de Grand Slam poder disputar el primer grande de la temporada, aunque la última decisión sobre su estadía en Melbourne la tomará el ministro de Inmigración, Alex Hawke.
Según un comunicado posterior a la determinación, un portavoz del ministerio comentó que el "proceso está bajo consideración" y que la decisión puede ser tomada por Hawke según sus facultades especiales correspondientes al artículo 133C(3) de la Ley de Inmigración.
El gobierno de Australia exige que quienes entren al país cuenten con la pauta completa de la vacuna contra el coronavirus o una exención médica. Djokovic optó por lo segundo y presentó como argumento el haber tenido covid en los últimos seis meses tras un supuesto contagio a mediados de diciembre, aunque se criticó en Australia que en sus redes sociales se le vio en actividades sociales sin mascarilla en los días posteriores a eso.
Va a jugar
Conocida la liberación, Djokovic habló por primera vez desde que arribó a Melbourne y dijo que su idea es quedarse y jugar para intentar conseguir su Grand Slam número 21, lo que lo transformaría en el más ganador de la historia superando por uno a Roger Federer y Rafael Nadal.
"Estoy muy agradecido de que el juez revocase la cancelación de mi visado. Pese a todo lo que ha ocurrido, quiero quedarme y competir en el Open de Australia. Sigo centrado en ello. He volado hasta aquí para jugar en uno de los torneos más importantes que tenemos delante de unos aficionados increíbles", fue parte de su mensaje en sus redes sociales.
En Belgrado, sus padres y su hermano Djordje encabezaron otra conferencia de prensa donde valoraron su libertad y acusaron la "tortura" que, según ellos, sufrió en los días que estuvo en el hotel. "Esta es la mayor victoria de su carrera. Es más grande que cualquier Grand Slam", dijo su madre Dijana.
Su padre Srdjan calificó el fallo como un "triunfo del mundo libre", y consultado respecto a cómo está el ánimo de Djokovic tras la resolución, reveló que "Novak está genial. Él tiene tal fuerza mental que todo esto no lo ha alterado en absoluto. Le ha dado energía adicional. No puede esperar a que llegue el 17 de enero, a que empiece el torneo. Ganará los siguientes diez torneos".
"Pese a todo lo que ha ocurrido, quiero quedarme y competir en Australia. Sigo centrado en ello",
Novak Djokovic, número 1 del ATP