El conocido doctor Jara se despidió del hospital después de 42 años de labor
El lunes pasado el pediatra marcó por última vez su huella digital en el Claudio Vicuña. Ahí recibió el cariño de los trabajadores y colegas.
Acompañado por colegas y un grupo de trabajadores, el doctor Juan Francisco Jara Gómez marcó por última vez su huella digital como funcionario del hospital Claudio Vicuña de San Antonio, centro asistencial en el que prestó servicios durante más de 42 años.
El lunes pasado el conocido doctor Jara cumplió su última jornada laboral en el recinto de salud luego de acogerse al incentivo al retiro voluntario.
El médico pediatra fue despedido por sus compañeros de servicio, representantes de la dirección y de la Asociación de Médicos, Químicos Farmacéuticos y Bioquímicos (Afuqom) del establecimiento, además de funcionarios que fueron cercanos al facultativo durante su dilatada trayectoria.
"Es muy difícil resumir lo que se siente después de más de 40 años de trabajo en un lugar donde uno ha dado la vida, donde ha vivido experiencias de todo tipo", partió comentando el doctor al ser consultado por sus sensaciones en el momento del adiós laboral.
"Aquí he encontrado apoyo y amistades para seguir adelante. Siento gratitud hacia la gente con la cual he trabajado, reconocimiento y una motivación para seguir contento", añadió el pediatra que ha lo largo de su carrera ha atendido a miles de niños sanantoninos.
Visiblemente emocionado, el médico aseguró que durante las últimas semanas, en el día a día, sintió y valoró "lo que es tener un grupo de amigos, de compañeros de trabajo, de apoyo. El afecto lo sentí día a día y con más intensidad hoy (lunes)".
Su trayectoria
En diciembre pasado, en la conmemoración del Día del Médico, el facultativo oriundo de la localidad de San Juan contó que "llegué a trabajar en agosto del año 1979, al anexo del antiguo hospital, que era de madera y adobe, con acceso por calle Lautaro, que tenía como sello característico dos palmeras en la entrada".
En esa misma entrevista recordó que cuando ingresó al Claudio Vicuña "había muy poco y se hacía medicina rudimentaria, por ejemplo, con partos atendidos solo por matronas. Hemos ido de menos a más y aún queda mucho por hacer. Lo que tenemos es fruto del trabajo permanente de los profesionales que nos quedamos en el hospital".
"A pesar de que me iré jubilado el próximo año, mi etapa formativa aún no está terminada. El conocimiento es una necesidad permanente, pero se debe dejar espacio para que otros médicos lleguen al establecimiento", manifestó en esa oportunidad.
El doctor Jara afirmó que pudo ejercer la medicina en dos siglos totalmente diferentes. "El primero analógico y el segundo totalmente digital, que en San Antonio se vivió con lentitud. Por ejemplo, en la segunda mitad de los años 80 llegó el primer ecógrafo a la Maternidad".
En esa misma ocasión, aprovechó de recordar y reconocer la labor de "gente importante para el hospital, como el doctor Jorge Palma en anestesia, y en cirugía los doctores Mario Da Venezia, Ximena Parada y Paul Rojas, y colegas pediatras que organizaron los servicios tanto de Pediatría como de Neonatología. Y finalmente, a la doctora Carmela Menares, a quien destaco por su capacidad conciliadora, la firmeza de sus convicciones y la seriedad que muestra en su trabajo".
Gran sabiduría
Esta última, precisamente, alabó las condiciones humanas y profesionales de su colega que se acogió a retiro. "Trabajé 39 años con el doctor Jara, un hombre muy solidario, humilde, amistoso, conciliador, siempre preocupado por los demás y con una gran sabiduría. Entregado ciento por ciento a la atención de los pacientes, comprometido y con una vocación innata de servicio público", dijo Carmela Menares.
"Es muy difícil resumir lo que se siente después de más de 40 años de trabajo en un lugar donde uno ha dado la vida, donde ha vivido experiencias de todo tipo",
doctor Juan Francisco Jara
"Trabajé 39 años con el doctor Jara, un hombre muy solidario, humilde, amistoso, conciliador, siempre preocupado por los demás",
Carmela Menares