Redescubriendo al creador: Surge el Archivo Alfonso Letelier
A 110 años del natalicio del compositor se revela su vínculo con el folclor. Esta entidad es la primera apuesta musicológica de Eltit, respaldada por Carmen Luisa Letelier.
Yvaín Eltit - Presidente Sociedad de Folclor Chileno.
La musicología (estudio científico de la teoría e historia de la música) siempre me fue ajena hasta empaparme del pensamiento del compositor e intelectual, miembro fundador de la Asociación Folklórica Chilena (Hoy Sociedad de Folclor Chileno), Domingo Santa Cruz Wilson (1899-1987).
Una pléyade dorada de músicos nacionales fueron miembros fundadores de la entidad que presido en 1943, convocados por el médico Aureliano Oyarzún Navarro (1858-1947) y el folclorólogo Oreste Plath (1907-1996), como Carlos Lavín Acevedo, María Luisa Sepúlveda Maira, Remigio Acevedo Raposo y Cora Bindhoff Enet.
En 1948 con motivo de los "Festivales y Concursos de Música Chilena", Domingo en persona invitó como miembros a Víctor Tevah Tellias, Vicente Salas Viú, Carlos Isamitt Alarcón y Alfonso Letelier Llona (1912-1994).
De aquel último músico había oído en mi niñez "Vida del campo" (1937), un bello movimiento sinfónico para piano y orquesta, el que refleja la estrecha relación que tierra y música poseían para él.
Sin embargo, escasos esfuerzos se han tenido por profundizar en su legado y colocar sus obras en los programas doctos chilenos. Esa actitud oscurantista tuvo como resultado un cuestionamiento permanente que le manifesté a nuestra consejera de la Sociedad de Folclor Chileno, profesora Carmen Luisa Letelier.
En sus palabras: "La vigencia de mi papá hoy es por su estilo muy chileno. Tenía cierta armonía y forma de componer, con un trasfondo país".
No bastaba con investigar el papel del compositor en el desarrollo del folclor del siglo XX, sino que debíamos dar un paso más, comenzar a escribir la biografía: "Los cartapacios de Alfonso Letelier".
La Real Academia Española (RAE) define cartapacio como: "Conjunto de papeles contenidos en una carpeta". Estos documentos se transformaron en la base para la fundación del Archivo Alfonso Letelier, el cual se divide en dos áreas: Vida y obra del compositor, y Músicos Chilenos.
El archivo cuenta con el patrocinio de la Sociedad de Folclor Chileno, y es una oportunidad histórica para nuevas investigaciones congruentes con el pasado, asumiendo su dimensión patrimonial, donde don Alfonso es protagonista.
Permite posicionar al creador en su rol gravitante para los estudios musicológicos latinoamericanos, siempre indivisible al folclor. Su lazo con el organista argentino Julio Perceval, el compositor brasileño Camargo Guarnieri, o su desconocida amistad con el compositor chileno Donato Román Heitmann, quien pasó sus últimos años en San Antonio, son algunos de los inéditos antecedentes.
Por otra parte, hace un tiempo vengo reuniendo una colección de partituras de compositores nacionales como María Luisa Sepúlveda, Osmán Pérez Freire, Armando Carrera González, Nicanor Molinare Rencoret, entre otros. La urgencia por traer al presente las creaciones que hablan de escenas rurales, sentimientos o diversas postales, incentivaron el diseño de una propuesta musical que no colocara estos manuscritos en archivadores para examinarlos con guantes blancos, sino escuchar cada melodía para demostrar una vez más el vínculo entre folclor y música sin ideologías.