Despiden a querida comerciante de botillería del cerro Placilla
La reconocida vecina de calle Ortúzar, Beatriz Toledo Escobar, es recordada por amigos que quisieron rendirle un homenaje.
La recordada vecina de Placilla, dueña de la botillería Tentación de calle Ortúzar falleció el pasado 11 de mayo. Beatriz Toledo Escobar (1960-2022) dejó a su marido Roberto Acevedo González con quien tuvo dos hijos Roberto y Luis Felipe, además de dos nietos.
Durante más de 20 años fue comerciante, dueña de la botillería Tentación y socia de la Cámara de Comercio Detallista y Turismo de San Antonio.
Las familias Zepeda Manzo, Siglic Núñez, Ruiz Portilla, además de sus amigas Gisela Recabarren, Maritza Varela, Rossana Osses, Soledad Canelo y Mabel Díaz quisieron describir este triste momento y despedir a su querida amiga.
"Nos cuesta creer que se ha ido Beatriz, y, además, por alguna razón que no entendemos aún; tampoco entenderemos jamás, pues solo Dios lo sabe. No seguiremos compartiendo y disfrutando de tu espíritu y de tu compañía en los buenos y malos momentos. Tampoco seguiremos envueltos en el calor de tu maravillosa alma, que nos hacía sentir queridos y amados. Menos aún, seguiremos abrazados a esa bella, honesta y leal amistad, que nos prodigabas cada día", señaló Alejandra Núñez.
María José Manzo agregó palabras para Beatriz. "Nos cuesta aceptar que ya no estarás más con nosotros, en nuestros aniversarios, cumpleaños o celebraciones, donde tu presencia era importante, porque siempre te queríamos allí, alegre, divertida, cariñosa, amable, ingeniosa, cómplice, en fin, cientos de cosas más, que ahora solo serán recuerdos magníficos e inolvidables".
Asimismo, Soledad Canelo dijo que "su recuerdo no se termina aquí y ahora, estará en nuestras mentes y corazones, hasta que estos dejen de latir. Ella dejó una marca de amor imborrable, en cada uno de nosotros. Cada vez que nos reunamos, estará aquí entre sus amigos, pues queremos mantener viva su memoria, convencidos de que fuimos benditos por conocerla y el que fuera parte de nuestra vida. Beatriz ha sido el mejor regalo divino que pudimos recibir, de lo cual estamos eternamente agradecidos".
Rossana Osses manifestó que "fuimos testigos, que luchó hasta el final para quedarse, pero los designios del destino fueron otros, por eso ahora, solo queremos que descanse en paz, en el maravilloso y merecido lugar en el que se encuentra, ya que nosotros cuidaremos de su familia y sus seres queridos, ellos no estarán solos. Pero algún día, siguiendo las leyes de la vida, uno a uno de nosotros, partiremos a reunirnos con ella, para nuevamente continuar con esta historia de bella amistad. Por eso decimos, hasta una nueva oportunidad queridísima y amada amiga".
20 años y más se dedicó al comercio Beatriz Toledo Escobar.