plagas, precios y sequía
Los frutilleros también están resistiendo otra plaga: la mosca de alas manchadas que igualmente ataca a frambuesas, moras, arándanos y en algunas ocasiones la uva. Su presencia se detectó por primera vez en el 2017 y con el paso del tiempo ha seguido esparciéndose por el país, incluyendo Santo Domingo, donde también fue alertada. El año pasado, la Dirección Regional de Indap informó de la distribución de 300 trampas a lo largo de la provincia de San Antonio para evitar la propagación de esta plaga. A lo anterior también hay que sumar los efectos de la sequía y los altos precios de los fertilizantes. Todo eso hizo que el verano pasado se registran imágenes de productores en la vecina comuna de San Pedro, quienes tuvieron que eliminar parte de su producción.