Hondo pesar por fallecimiento de joven trabajadora que era madre de dos niños
La manipuladora de alimentos Jazmín Quintanilla enfermó en 2021 y en pocos meses su salud se deterioró de manera irreversible. Mientras la velaban familiares recibieron llamado para hora médica que nunca llegó.
Como una cruel ironía, a la misma hora que comenzaba el velatorio de Jazmín Angélica Quintanilla González, de 29 años, en su casa del cerro Bellavista, llamaron a su familia desde el Servicio de Salud Valparaíso-San Antonio para avisarle que ya estaba disponible su hora para la interconsulta.
La misma interconsulta que nunca llegó y que obligó a la familia de la manipuladora de alimentos a buscar tratamiento en hospitales privados, tras el cáncer cervicouterino que le fue detectado en 2021.
Sobre el deceso de su prima, que fue para ella como una verdadera hermana, muy acongojada Andrea Barbatto relató a Diario El Líder que "cuando se le detectó a Jazmín el cáncer cervicouterino el año pasado fue al médico, empezaron a pedir interconsultas que nunca llegaban por lo que no pudo empezar un tratamiento altiro y como estaba mal decidimos llevarla al hospital Clínico de la Católica. Entonces cuando le hicieron los exámenes le había crecido el tumor y se le había ramificado al pulmón, por lo que tuvimos que dejarla varias semanas en Santiago, después le dieron el alta y empezó la radioterapia que no dio resultado y le empezó a fallar un riñón, después el otro y así sucesivamente".
Andrea contó también que en medio de ese proceso "la trajimos a la casa con medicamentos, inyectándose morfina, pero estaba con muchos dolores y estuvo en Santiago otra vez, hasta que la trasladaron a Valparaíso donde la junta médica vio que no funcionaba la quimioterapia, así que volvió a la casa, pero como no aguantaba los dolores hubo que llevarla al hospital, porque le fallaron los riñones, le hicieron muchas transfusiones de sangre y estaba con oxígeno las 24 horas del día. El sábado ya no nos reconocía, el domingo estaba sedada y hoy (ayer) nos llamaron porque había entrado en paro y murió como un cuarto para las diez".
Madre
El drama por la muerte de la manipuladora golpeó fuerte a su familia ya que la joven era madre soltera de dos pequeños niños de 12 y 6 años, respectivamente.
"Jazmín tenía dos hijos, Martina, de 12 años, y Milan, de 6. Ella trabajaba para ellos como manipuladora de alimentos en el colegio Lion´s School y aunque siempre fue de Cartagena, de la población Arellano, le había salido la casa a su mamá acá en Bellavista, en la Villa Génesis, donde la estamos velando con su familia y sus amigos", contó Andrea Barbatto.
Agradecimiento
A nombre de la familia y cercanos a Jazmín Quintanilla, su prima quiso "solamente agradecer de todo corazón a toda la gente que estuvo preocupada de ella, al grupo de los "Amigos Solidarios" de Cartagena que nos estuvo acompañando, a la gente que nos ayudó con los platos únicos que hicimos para costear su tratamiento. De hecho, el "Farkas Pobre" nos consiguió con el alcalde de El Tabo un tubo de oxígeno para que pudiera moverse por la casa, también nos apoyó siempre la concejala Patricia Quiroz de Cartagena, harta gente que nos apoyó mucho también, quisiera nombrar a tantas personas que nos apoyaron, gente que estuvo con nosotros en todo esto que fue tan difícil".
Jazmín Quintanilla González está siendo velada en la casa de su madre en la Villa Génesis en el cerro Bellavista de San Antonio, lugar donde se había mudado recientemente desde su querida Cartagena.
Sus funerales se realizarán mañana miércoles en un cementerio y horario por confirmar, ya que la familia se encontraba realizando los trámites para que las exequias de la cartagenina se desarrollen de acuerdo con sus últimos deseos.
29 años tenía Jazmín, la manipuladora de alimentos que falleció de cáncer.