Profesor tabino casi muere luego de que no le detectaran una apendicitis
Cristian Aguirre acusa negligencia por parte del Cesfam de El Tabo, a donde fue dos veces sin que le diagnosticaran la causa de su malestar. Hoy requiere $11 millones para una segunda operación y corregir las secuelas con que quedó.
Cristian Aguirre siempre gozó de buena salud, pero eso cambió radicalmente en diciembre del año pasado cuando fuertes dolores en el abdomen comenzaron a molestarlo.
Fue dos veces al Cesfam de El Tabo, pero no se detectó qué tenía.
Días después, cuando llegó de urgencia al hospital Clínico de la Universidad Católica, en Santiago, le indicaron que había sido una apendicitis que, debido a su tardío diagnóstico, se convirtió en una peritonitis.
Dolores
Cuenta que la madrugada del 20 de diciembre empezó a sentir "fuertes dolores en toda la parte baja de la guatita, acompañado de colitis y poco vómito".
"Ese día lunes estuve en cama para el martes 21 de diciembre ir a la Urgencia de El Tabo. Ahí se me puso un litro y medio de suero, más viadil para el dolor, y otros medicamentos para la colitis y vómito. El diagnóstico fue que algún alimento me cayó mal", agrega.
El miércoles volvió a trabajar como docente en la comuna de El Tabo, pero en la madrugada del jueves 23 volvieron los malestares.
"Comencé con fuertes dolores en la parte baja de la guatita, pero solo en la parte derecha, acompañado de una baja de presión y tercianas", explica.
Según su relato, llegó cerca de la 1.30 y fue atendido por una doctora y dos tens.
"La doctora palpó el lugar y a pesar de sentir dolor en la zona, aplicó el mismo procedimiento: medio litro de suero y calmante para el dolor".
Pero hubo otra diferencia. Dice que "el turno completo se acostó a dormir. Mi esposa en varias ocasiones recorrió la posta para que alguien me desconectara, solicitando ayuda a los guardias sin conseguir nada. Como no apareció nadie, tipo 4 de la mañana me tuve yo solo que sacar la vía y retirarme a mi casa".
"El sueño del personal pudo más que la atención a un paciente, ni menos saber cuál fue el diagnóstico que observó la doctora durmiente", añade.
El 24 de diciembre "dormí gran parte del día, sin poder participar de la cena de Navidad, ni menos participar de abrir regalos con mis hijos. Mi piel cambió de color y por ese motivo tuvimos que buscar a alguien que nos pueda cuidar la casa y nuestras mascotas para el día siguiente ir a consultar a otro lugar".
Grave
En Navidad ingresó al centro asistencial de Santiago y "con una simple palpación, similar a la realizada en la urgencia de El Tabo (…) el doctor dijo 'vienes con una apendicitis avanzada, pero debemos hacerte un scanner'".
Menos de una hora después, "vuelve el doctor diciéndome que me estoy muriendo y si no me operan en las siguientes tres horas moriría porque ya era una peritonitis avanzada, y me estaba llegando pus a los pulmones".
"La operación duró tres horas y media, cuando lo normal es una hora, logrando salvarme la vida", prosigue.
La epicrisis del Departamento de Cirugía Digestiva del Hospital Clínico indica que al momento del ingreso la apendicitis se había agravado hasta alcanzar "signos de complicación gangrenosa".
Tras esto, estuvo en un tratamiento que lo mantuvo 33 días hospitalizado.
"Hoy tengo una secuela, que se unió la vejiga con el intestino, tengo que operarme, pero me piden 11 millones de pesos", prosigue.
Ese monto se suma a los cerca de 50 millones de pesos que costó la hospitalización.
No tiene dinero para la segunda operación y sabe que corre contra el tiempo. Sin el financiamiento ninguna de las alternativas es buena: volver de urgencias al mismo centro de Santiago o ingresar nuevamente al Cesfam para que tramiten una interconsulta que puede tardar años.
Colocó un reclamo ante la Superintendencia de Salud en contra del Cesfam de El Tabo, que, según su relato, se declaró "incompetente". También se hizo una mediación en el Consejo de Defensa del Estado que no dio resultados.
Consultados por Diario El Líder, desde el municipio indicaron que el alcalde ordenó una investigación para recabar los antecedentes del caso antes de entregar una respuesta más detallada.
Ayuda
Por ahora y rogando para que su condición no se agrave nuevamente, Cristian espera organizar un evento benéfico para reunir el dinero de la operación.
Mientras tanto, cualquier aporte es bien recibido en la chequera electrónica 36570852536 del Banco Estado a nombre de Cristian Aguirre, rut 10.863.238-0, email: profecristianpc@gmail.com
"Si no me operan en las siguientes tres horas moriría, porque ya era una peritonitis avanzada, y me estaba llegando pus a los pulmones",
Cristian Aguirre.
33 días estuvo hospitalizado el profesor de la comuna de El Tabo.