Notó usted que en la lista de partidos que la TV abierta transmitiría en vivo, no estaban los dos primeros partidos de Argentina en el mundial, pero lo curioso es que sí estaba el tercero, con Polonia...
¿Qué pasó?
De seguro quienes negociaron las transmisiones pensaron que los dos primeros (con Arabia Saudita y México) le darían "al trote" la clasificación a la Argentina y el partido con Polonia iba a ser uno más, sin mayor interés general...
¡Craso error!
Porque resulta que el miércoles 30 de noviembre, el partido de Argentina con Polonia es clave, para saber quiénes pasan a la siguiente fase, ojalá que no se arrepientan, y cambien la programación, cuando el dueño de los derechos de los partidos empiece a sacar las cuentas por los futuros abonados que se perderán de captar, de no haber sido emitido esta verdadera final por la TV abierta...
Luis Enrique Soler Milla