Persecución deja a detenido con $4 millones en drogas y subametralladora "hechiza"
El arrestado intentó atropellar a funcionarios policiales antes de fugarse en un vehículo a toda velocidad, el que luego estrelló en el puente Lo Gallardo. Ayer lo formalizaron y quedó en prisión.
En la Playa Norte de Santo Domingo comenzó una persecución policial que terminó cuando el chofer perdió el control de su automóvil y chocó en el puente Lo Gallardo, cuando cruzaba hacia San Antonio.
El procedimiento policial se originó luego de una fiscalización de rutina. Esto porque a las 2.50 horas de ayer se detectó que un vehículo marca Subaru, modelo Legacy café avanzaba por Gran Avenida del Mar en contra del tránsito, por lo que funcionarios de la Subcomisaría de Carabineros de Santo Domingo quisieron fiscalizarlo.
Sin embargo, al llegar los policías a dicha avenida, el conductor trató de arrollarlos.
El fiscal Francisco Martínez, detalló que "se cuenta con la declaración del funcionario aprehensor, quien señala que (…) se encontraban realizando patrullajes en Santo Domingo, a llegar a (Gran) Avenida del Mar se percatan de la presencia del vehículo que se encontraba en contra del sentido del tránsito, detenido, se bajan a fiscalizarlo, y al momento de bajar los funcionarios, este auto avanza hacia ellos en disposición de atropellarlos, posteriormente el chofer se abstiene de eso, hecha marcha atrás y huye".
El conductor manejó marcha atrás a tal velocidad que chocó y perdió el parachoques trasero, para luego arrancarse.
Tras esa maniobra carabineros, apoyados por Seguridad Ciudadana de la municipalidad santodomingana, desplegó un operativo por la comuna para atrapar al individuo, contando también con la cooperación de otras unidades policiales.
Así, cuando el vehículo ingresó al puente Lo Gallardo se encontró con congestión vehicular provocada por camiones que a esa hora transitaban hacia la Ruta de la Fruta, momento en que se vivió otra situación que puso en peligro a los uniformados.
"Impacta un borde del puente Lo Gallardo, instancia en la cual se procede a su fiscalización, cuando desciende del automóvil con un armamento en sus manos, al no tener peligro inminente de que disparara, carabineros comienzan un diálogo con él para reducirlo y que soltara el armamento", informó el jefe de la Subcomisaría de Santo Domingo, teniente Miguel Martínez.
Sobre la dinámica que sucedió en el puente, el fiscal Martínez pormenorizó que el sujeto intentó lanzarse de este antes de ser arrestado.
El sujeto, identificado como Claudio A.L.H. (24), arrojó el arma, la que fue recuperada por la policía.
Entonces descubrieron que se trataba de una subametralladora de confección artesanal, la que estaba cargaba con 24 municiones, puesto que está acondicionada para disparar por ráfagas.
Además, dentro de un banano que llevaba el chofer, los carabineros encontraron una gran cantidad de drogas y descubrieron que mantenía tres órdenes de detención pendientes, entre las que está una causa en que se le sindica como autor de un homicidio.
Decomiso
Los funcionarios policiales incautaron el minifusil UZI con sus 24 municiones y otros 19 tiros que se mantenían ocultos dentro de un calcetín y que eran calibre .380, de alto poder de fuego.
Encontraron además varias dosis de cocaína, las que arrojaron un peso de 451 gramos 700 milígramos, la que fue avaluada por la policía en 4 millones de pesos.
Esto junto a otros 4 gramos de marihuana.
Formalizado
El fiscal Francisco Martínez ayer formalizó a Claudio A.L.N., oriundo de Melipilla, por el delito de tráfico de drogas y porte ilegal de arma de fuego prohibida, solicitando que fuera puesto en prisión preventiva por los graves delitos por los cuales se le acusa.
Además expuso que el veinteañero mantenía las órdenes de detención para ser puesto en la cárcel para cumplimiento efectivo de dos condenas. Este fue condenado por el Tribunal Oral en lo Penal de Melipilla a un año y medio de prisión por el delito de porte ilegal de arma de fuego y a otra pena idéntica como autor de tráfico de drogas, manteniéndose prófugo desde junio de 2022.
Ante las pruebas expuestas en la audiencia, el juez Felipe Contreras resolvió que "existen antecedentes suficientes para acreditar la participación del imputado en el hecho ilícito vinculada al tráfico, por la cantidad de droga incautada, específicamente la cocaína (...). Y los antecedentes que ha entregado la fiscalía son suficientes para, en esta etapa, establecer que el arma que se le incauta al imputado es un arma 'hechiza', como se le denomina, lo que es sancionado por la ley de Armas".
Se decretó que fuera enviado a Melipilla para que responda por las dos condenas de 600 días que presenta. Al cumplirlas quedará en prisión preventiva por esta causa.