Juzgado de Familia de Casablanca reunió a madre con su hija tras decisión del hospital
Un recurso de protección por un supuesto consumo de drogas de parte de la madre mantuvo a una guagüita recién nacida alejada de su familia. La sindicada anunció acciones legales por el mal causado.
"Hola, me entregaron a mi hija". Con estas palabras Solange González Ganz se comunicó con nuestro equipo de prensa a las 12.05 de ayer viernes, justo cuando el Juzgado de Familia de Casablanca había fallado en su favor revocando la medida de protección que interpuso el hospital Claudio Vicuña, luego que Solange diera positivo para el consumo de metanfetaminas en un examen que le tomaron el día de su parto, el 9 de enero pasado.
La medida de protección solicitada por el hospital de San Antonio derivó en una prohibición judicial de sacar a la pequeña desde el centro médico local hasta que el Juzgado de Familia de Casablanca, con jurisdicción en la comuna de El Quisco donde reside la madre, resolviera sobre el caso en una audiencia que se realizó en dos instancias, el miércoles y viernes de esta semana.
El caso de Solange González, publicado la semana pasada por diario El Líder, impactó a la provincia de San Antonio y llegó a convertirse en noticia nacional cuando la desesperada madre clamó por justicia asegurando que jamás ha consumido drogas y sin contramuestras se interpusiera la medida judicial que incluso le impidió amamantar a su hija y menos llevársela a casa.
Con exámenes particulares Solange demostró que no consumía drogas y pudo lactar recién este viernes luego que el Juzgado de Familia de Casablanca falló a su favor permitiéndole llevarse a casa a la pequeña que nació el lunes 9 de enero.
"Estoy feliz, muy ansiosa porque por fin voy a poder sacar a mi bebé de este lugar; así que voy a estar con ella hasta que entreguen el papel del alta y mientras el papá de la niña va estar con mi suegra esperando abajo para cuando nos llevemos a la niña y terminar con esta pesadilla que hemos sufrido como familia. No puedo más de la emoción porque mi niñita por fin podrá estar con nosotros, con su familia, en nuestra casa", fue lo primero que dijo Solange mientras se hacían efectivos los trámites tras el dictamen del Tribunal de Familia de Casablanca.
A casa
Y cuando el reloj marcaba las 15 horas del viernes 20 de enero, justo once días exactos después de haber nacido, la pequeña Alanis Ignacia salió desde el Servicio de Maternidad del hospital Claudio Vicuña de San Antonio en brazos de su madre, mientras en la puerta la esperaban su padre Maickol Herrera y su abuela Linda Correa.
En ese mismo lugar Diario El Líder tuvo la posibilidad de conversar con Solange González, quien relató que "luego de todo lo que pasó este es un momento muy bonito porque en medio de todo el sufrimiento que pasábamos lo único que queríamos era llevarnos a nuestra niña y que ella pudiera estar con nosotros, sus padres, con sus hermanos y su familia que recién ahora va a poder conocerla".
Sobre la decisión del Juzgado de Familia de Casablanca, Solange contó que en estos días la visitó en su casa de El Quisco "la Oficina de Protección de la Infancia, se vieron los documentos del consultorio donde estoy inscrita del año 2013, que mis otros dos hijos tienen todos sus controles al día. Incluso la magistrada, como los exámenes tenían fecha para 6 a 9 meses más, ordenó que el 30 de enero me hagan los exámenes de pelo, sangre y orina en el Servicio Médico Legal para comprobar que no consumo nada y que es justo lo que yo pedí que se hiciera; y mientras tanto a la niña se le dio el alta provisoria con la tutela de mi suegra, pero ella va a estar conmigo".
Apoyo
Sobre el dictamen del Juzgado de Familia de Casablanca, Solange González relató que en su intervención la magistrada "dijo que se vulneraron los derechos a mi hija si es que salen negativos esos exámenes y que si eso es efectivo se nos vulneraron los derechos porque nos quitaron el apego, preguntó por qué no hicieron una contramuestra, o por qué no le tomaron muestras a mi hija, o sea la jueza dijo que se había hecho todo mal y más que una jueza yo sentí que era una abogada defensora porque entendió todo lo que estábamos reclamando y ordenó que me hicieran los exámenes porque yo nunca he consumido drogas".
Del mismo modo la madre sindicada como consumidora de drogas advirtió que "esto no se va a quedar así, porque yo soy inocente y nos hicieron un daño muy grande a mi familia y a mis hijos, les pedí muchas veces que me hicieran una contramuestra y si era negativa me bastaba una disculpa, pero se negaron y nos hicieron daño. Ahora me voy a hacer todos los exámenes porque es lo que corresponde y de ahí en adelante que pase lo que tenga que pasar, porque ahora lo único que quiero es estar con mi hija ya que todo lo que pasamos no se lo doy a nadie".
En ese mismo lugar, Maickol Herrera, el padre de la niña dijo que "como padres estamos felices, es indescriptible la emoción que sentimos, porque ustedes vieron todo lo que sufrimos y por eso mismo les quiero dar las gracias por ayudarnos a hacer público lo que nos estaba pasando y a través de ustedes a toda la gente, a las miles de personas, porque son miles los que nos dieron su apoyo. Ya tengo a mi niñita con nosotros y eso es lo único que queríamos, gracias por apoyarnos, gracias por creer en nosotros".