El canto del olvido: cincuenta años sin el cantautor Rolando Alarcón Soto
En el aniversario de la partida del destacado músico nacional nos acercamos a su prolífico trabajo. Entre sus escenarios, nuestras costas fueron frecuentes.
Yvaín Eltit - Presidente Sociedad de Folclor Chileno.
Luis Rolando Alarcón Soto nació en Santiago el 5 de agosto de 1929. Se crió entre Sewell, Machalí (Región de O'Higgins); y Chillán (Región de Ñuble).
Se formó como profesor normalista, trabajó en escuelas y liceos estatales.
Inició su carrera musical en la Escuela de Temporada de la Universidad de Chile (1955). Ese verano conoció a la folclorista Margot Loyola Palacios, conformando el conjunto folclórico Cuncumén (en voz mapuche es murmullo del agua), Rolando asumió como su director artístico por 7 años. Recorrieron Chile y Europa con vastas giras, cuyo resultado fueron tres discos.
En 1962 tras su salida de la agrupación, formó una dupla con la cantante Silvia Urbina Pinto. Grabaron un original registro de canciones rusas y seis canciones de su autoría, entre ellas la conocida "Doña Javiera Carrera". Ambos realizaron una gira por Perú, Panamá y Estados Unidos.
En 1963 Rolando asesoró la creación de un inédito material folclórico-pedagógico y musical, titulado "Cantos y danzas folklóricas de Chile" para el grupo folclórico de profesores del 5º sector escolar de Santiago. Se trató de un cuadernillo de 55 páginas donde abordaron diversos bailes como: el sombrerito, la nave, la mazamorra, la sirilla, la refalosa, el chapecao, etc., con letras y dibujos explicativos.
Destacó una seleccionada bibliografía para dar contexto: "Orígenes del arte musical en Chile" del historiador Eugenio Pereira Salas; "Baraja de Chile" del folclorólogo Oreste Plath, entre otros.
En 1965 se incorporó al elenco de la obra teatral "La pérgola de las flores", yendo de viaje a México. En esa visita se inspiró para componer "Si somos americanos", otra pieza musical muy difundida, incluida en su primer álbum solista "Rolando Alarcón y sus canciones", publicado ese mismo año.
Presentó dos discos más: "Rolando Alarcón" (1966), que contó "Mi abuela bailó sirilla"; y "El nuevo Rolando Alarcón" (1967), en esta nueva apuesta sonora lo apoyó el sello Odeón.
En 1967 compitió en el Festival de Viña del Mar con su canción "Niña sube a la lancha", interpretada por Pedro Messone, obtuvo el tercer lugar.
En 1968 inauguró su propia compañía discográfica llamada "Tiempo". Su primera colaboración fue "Canciones de la Guerra Civil Española" junto al dúo "Los emigrantes".
En paralelo estuvo activamente en peñas como la de los hermanos Parra, y "Chile ríe y canta" del locutor radial René Largo Farías, lugares donde germinó el movimiento sociocultural "La nueva canción chilena".
En 1970 fue un entusiasta colaborador de la campaña presidencial de Salvador Allende Gossens, aportó con su voz en cada rincón. Llegó hasta Cartagena, El Tabo y San Antonio.
En 1973 en una gira invitado por la peña de Largo Farías ayudó a poner un bus en movimiento, lo que ocasionó que una antigua úlcera juvenil desencadenara en una hemorragia interna.
Rolando Alarcón Soto falleció en el hospital del Salvador, Santiago, el 4 de febrero de 1973 a los 43 años. Sus restos descansan en el Cementerio General de Recoleta.