"Violeta y la rara. Ciencia al aire libre para curiosear el mundo"
Dentro de las muchas propuestas de libros, este trabajo -"Violeta y la rara. Ciencia al aire libre para curiosear el mundo" de la bióloga Marioli Saldías, con ilustraciones de Cristian Garrido-, destaca por la calidad material: tapa dura, papel couché, excelente resolución de imágenes y un tamaño generoso; lo que lo hace muy atractivo para el aprendizaje y el interés de los niños y niñas. Un acierto de la editorial Pehuén.
A través de la interacción de Violeta y el ave la rara, llamada lihuén, se va explorando y poniendo énfasis en aspectos claves de la ciencia auténtica: la curiosidad, la indagación, la duda, la pregunta. Además, matizado con una consciencia medioambiental y por el cuidado de todo el entorno natural. Es decir, abordar este texto y, sobre todo, permitir que la infancia pueda acceder a este reconocer del espíritu esencial de la ciencia en tiempos actuales
-donde otros intereses, otras dinámicas, han desviado el eje de los descubrimientos y las teorías- no solamente es interesante, sino que también necesario.
El foco del texto se orienta a partir del ciclo de indagación de Peter Feinsinger, por lo tanto, lo científico se aborda desde una práctica científica, disponible y accesible para los lectores y lectoras, estimulando la observación a partir de los distintos sentidos y, se subraya, siempre cuestionando, haciendo preguntas, curioseando. De este modo, el pensamiento reflexivo y crítico se enarbola como una bandera clave de la búsqueda del saber versus la aceptación del conocimiento como si fuera un dogma.
Mediante precisas y didácticas explicaciones, el libro contiene un recorrido por el método científico organizado a través del Ciclo de indagación de Feinsinger: luego de observar y despertar la curiosidad, surge a) la pregunta, luego, b) la acción y, c) la reflexión. La acción se refiere al proceso de recolectar información para, posteriormente, llegar a la reflexión. De ese modo, nos enfrentamos a distintos experimentos, observaciones y mediciones, organizados en cinco actividades, encabezadas por las siguientes preguntas a explorar: 1. ¿Qué cantidad de agua rebasa y no es absorbida por la tierra contenida en tres bandejas que tienen inclinaciones o pendientes diferentes?; 2. ¿Cuáles y cuántas plantas habitan en lugares soleados y sombreados del patio del colegio?; 3. ¿Cuántos pajaritos visitan el patio durante la mañana y el mediodía?; 4. ¿Cuántas lombrices de tierra se encuentran en zonas de suelo cubierto de vegetación y en zonas de suelo sin vegetación (suelo desnudo) de la plaza?; 5. ¿Cómo varía la dureza del suelo de la plaza entre zonas con pisoteo y zonas sin pisoteo?
Sin duda, un libro para despertar la curiosidad y la pasión por el saber, imprescindible, no solo para la infancia, sino también para toda edad que habita hoy nuestro planeta.