A los 77 años falleció profesor normalista que fue prisionero político
Héctor "Tito" Pardo dejó huella como activo dirigente político en San Antonio y sus hijos lo recordaron como un hombre íntegro y comprometido.
"Sin duda fue quien nos marcó los valores políticos, el sentimiento de solidaridad, de comunidad, de democracia en el sentido profundo del concepto, de pueblo y la dignidad que debe tener el pueblo en una vida libre para desarrollar todas sus capacidades. Eso y el respeto a todas las personas fue lo que nos legó nuestro padre, igual que no claudicar ante las situaciones difíciles y perseverar cuando los valores son profundos y universales".
Con estas palabras, Ariel Pardo (50) definió a su padre Héctor Arsenio Pardo Zamora, el histórico militante comunista, profesor normalista, contador y dirigente político sanantonino que falleció el martes a los 77 años.
Del mismo modo, Ariel recordó que "siendo muy joven mi papá estudio en la Escuela Normal José Abelardo Núñez y ahí egresó como profesor normalista y se fue a trabajar como profesor básico a Lolol y de ahí pidió su traslado a la escuela de Lo Gallardo. En esta escuela conoció a mi madre María Guacolda Quiñones, se enamoraron y se casaron".
"Desde muy niño tuvo inquietudes políticas y siempre se acordaba que cuando tenía como 10 años le dio la mano Salvador Allende en el estadio Municipal de San Antonio. De hecho, en la época que fue estudiante del Liceo Fiscal se hizo militante de las Juventudes Comunistas", dijo Ariel sobre "Tito" Pardo en el momento de su despedida.
Su militancia y participación en política lo convirtió en objetivo de la Dictadura y fue así como en 1974 Héctor Pardo engrosó la lista de prisioneros políticos de Tejas Verdes.
"En 1970 entró a estudiar al Tecnológico de la Universidad Técnica del Estado que estaba en San Antonio, fue presidente del centro de alumnos y con el Golpe de Estado en 1974 lo toman detenido y se lo llevan al regimiento de Tejas Verdes, que fue un período muy duro para nuestra familia, yo que era chico me tuve que ir a Santiago, y todo por ser dirigente estudiantil y estar vinculado a las Juventudes Comunistas", recordó Ariel sobre este durísimo momento que atravesó su progenitor.
Pero esa experiencia no melló su pasión, ya que "en los años 80 fue dirigente del Movimiento Democrático Popular, así que siempre como familia estuvimos angustiados por que le pasar algo, como lo que le ocurrió en 1974, pero afortunadamente no pasó nada", comentó su hijo.
Marcela, la hija mayor de Héctor Pardo, recordó que cuando ella y su hermano eran niños todavía su padre "empezó a estudiar Auditoría en la Usach (Universidad de Santiago de Chile) y luego de eso estableció su propia oficina contable donde trabajó hasta ahora. Dejó de ser profesor y pasó a ser contador auditor".
Héctor Pardo se casó en 1970 con María Quiñones, de quien había enviudado el año pasado. Fue padre de tres hijos Marcela, Ariel y Andrea, abuelo de cuatro nietos y fue recordado como un hombre trabajador, honesto y de ideales intransables.
Fue velado en la funeraria Belén de San Antonio donde recibió el cariño de su familia y de dirigentes políticos y sociales de San Antonio que destacaron sus virtudes. Hoy miércoles sus restos serán cremados en Santiago y luego de eso sus hijos y nietos esparcirán sus cenizas en su querido San Antonio donde vivió y luchó por la dignidad de su pueblo.
"El respeto a todas las personas fue lo que nos legó nuestro padre, igual que no claudicar y perseverar cuando los valores son universales",
Ariel Pardo, Hijo de "Tito" Pardo Zamora

