Mónica Jorquera Escobar

En un verdadero rompecabezas se convirtió con el pasar de los días la desaparición de un adulto mayor de 78 años que desapareció hace once días, sin dejar ninguna pista sobre su paradero.

José Hernán Farías Vera salió de su casa de Llolleo alto el pasado 28 de junio a las 8 de la mañana, momento que fue captado por una cámara de seguridad que recién ayer la hija del hombre que padece de demencia pudo conseguir y que se tratarían de las últimas imágenes de su padre.

Alexandra Farías, hija de José Hernán, explicó que las cámaras son de una vecina, donde se ve a su padre salir de su casa de calle Las Torcazas, echa llave a la reja y luego camina rápido.

"Lo veo caminando completamente normal, sin nada que me haga pensar que estaba pasando algo malo o que lo siguieran. Se le ve andar rápido porque él es así, camina rápido para todos lados, siempre me deja atrás porque es activo. La ropa que lleva puesta es la suya", analizó la joven de 18 años sobre la grabación.

En las imágenes a las que accedió Diario El Líder se le ve usar una chaqueta y pantalón oscuro, un chaleco gris y un gorro de lana negro.

La joven, que está embarazada, manifestó que vecinos le dijeron que habría tomado rumbo hacia calle Baquedano, pero no lo ha podido corroborar, pues no ha dado con testigos en esa intersección.

También comentó que en la Policía de Investigaciones, pues la Brigada de Homicidios está realizando diligencias para dar con el adulto mayor, le dijeron que encontraron unas imágenes de un señor que podría ser su padre en el sector de Alto Mirador, en calle Isla de Pascua.

"Anduve preguntando por allá y nadie lo vio, pegamos carteles de él en distintos puntos de ese sector, pero no tenemos noticias, también se colocaron carteles en el centro y nada. Es como si a mi papá se lo hubiese tragado la tierra, no se ha encontrado nada de él, el gorro, el llavero, algo".

Demencia

José Farías sufre de demencia, que lo lleva a olvidar detalles de su día a día e imaginar algunas situaciones, lo que para sus seres queridos es aún más preocupante que cumpla once días de extraviado.

"Mi papá sabe llegar a la casa, porque salía todas las mañanas y regresaba en un ratito, salía a conversar con amigos, pero a veces decía cosas que no tenían sentido, pero yo sabiendo de su demencia lo calmaba. Pero me da miedo porque alucinaba con que lo iban a matar y que tenía que ir a esconderse, creo que está escondido por algo que él piensa que le puedan hacer", explicó.

Contó a este medio que la última conversación que tuvo José Farías con su madre, en la casa que comparten en Llolleo fue de ese tipo, con un relato ilógico.

"En la mañana fue a la pieza de mi mamá (mantienen habitaciones separadas) y le abre la puerta hasta atrás y le dijo 'me robaron los pantalones' y mi mamá le responde que cómo se los van a robar, que los buscara y se fue a buscar y los encontró, se puso a reír y se vistió para salir. Mi mamá le dice '¿para dónde vas?' y él le dijo 'me voy de la casa y me voy a ir a esconder a la cueva' y no volvió más".

Ayuda

Alexandra Farías manifestó que no sabe dónde ir a pedir ayuda, aunque la PDI ya tiene el caso, pues dice sentirse abandonada.

"Hace unos días se perdió una joven (escolar) y la buscaron día y noche y apareció en buen estado al otro día. Entonces salieron todos a buscar, la PDI, Carabineros y hasta Bomberos. Yo me pregunto por qué esta vez, que es un adulto mayor con demencia y que ya lleva 10 días (ayer) perdido nadie ha salido a ayudarme a encontrarlo, no entiendo", expresó la joven.

-¿Estos días que has reflexionado sobre dónde podría estar?

-Escondido en un cerro por sus ideas (paranoicas). Me han preguntado si creo si se suicidó y yo eso lo descarto totalmente, porque me decía "quiero tener el mayor tiempo de vida para conocer a mi nieto o nieta", por eso no lo puedo creer y nunca lo voy a creer hasta que lo vayan, o vayamos, a encontrar.

Piden que por cualquier información sobre el paradero de José Farías se comuniquen al celular de Alexandra al +56 9 3348 7865 o al 134 de la PDI.

Los seis detenidos que tuvo el OS-7 de Carabineros este jueves tras el allanamiento de cinco viviendas, cuatro en Cartagena y una en El Tabo donde se vendían drogas, ayer fueron formalizados en el Juzgado de Garantía de San Antonio.

En la audiencia, el fiscal Juan Carlos Catalán les formuló cargos diferenciadamente a los imputados, a unos por tráfico de drogas y a otros por tenencia ilegal de arma prohibida y municiones, solicitando que todos ellos, cinco hombres y una mujer, fueran puestos en prisión preventiva por ser su libertad un peligro para la sociedad.

Sin embargo, la jueza María de los Ángeles Ceardi expuso que frente a las especies decomisadas -un total de 240 gramos de pasta base, 103 gramos de cocaína y 31 gramos de marihuana, junto a un arma a fogueo adaptada para el disparo y un bala 9 milímetros- y a que solo uno de los acusados presentaba antecedentes penales, decidió no enviarlos a la cárcel y decretó que se mantengan con arresto domiciliario nocturno y arraigo nacional.

Ante ello, el fiscal presentó un recurso verbal ante la Corte de Apelaciones de Valparaíso para que se revoque la medida de la magistrada y se decrete la prisión preventiva para los seis imputados, lo que será resuelto durante esta jornada.