Vecinos preocupados por desoladora realidad de un adulto mayor abandonado
Agobiados por la soledad de un anciano enfermo, pobladores de Plantación Fiscal asumieron rol que debería ser de la familia o del Estado
Desde la empinada esquina de los pasajes San Pedro con Oviedo, en la población Plantación Fiscal de San Antonio, surgió un relato de abandono y soledad que afecta al vecino Armando Araya, un hombre de 74 años, postrado y enfermo que vive de la caridad de los pobladores que decidieron levantar la voz para buscar de ayuda.
Nancy Pizarro, una de las vecinas del sector, describió a nuestro diario que "este caballero está abandonado hace tiempo. Nosotros lo conocemos desde hace muchos años acá con las vecinas porque él tenía una familia constituida, pero después del terremoto (de 2010) él quedó abandonado porque la esposa se fue a vivir a Rocas de Santo Domingo y su hija que, por lo que sabemos trabaja en el hospital, no lo visita tampoco, así que este caballero está totalmente solo".
"nadie lo cuida"
Esta vecina, que es una de las pobladoras que han asumido tareas de cuidado y preocupación por el adulto mayor enfermo y abandonado agregó que la dolorosa realidad de don Armando "es que por lo visto no tiene a nadie, porque por años ha estado totalmente solo. De hecho, acá se hicieron gestiones el año pasado para limpiarle su casita que como puede verse está en ruinas y le sacamos toda la basura porque tenía basura hasta acá mismo afuera y entre todos los vecinos le limpiamos toda la casa, todo el sitio, pero ahora pasa que está muy enfermo y está solito, nadie le cuida, nadie se hace cargo".
El desamparo de este adulto mayor se vuelve aún más evidente con el relato de la vecina Isabel Quezada, quien contó que "el pobre caballero esta solo en la vida, se ve que no tiene a nadie y a veces se ve hace fuego y puede pasar que con el fuego se le puede quemar su casa y él no va a tener cómo salir y si es un incendio agarran todas las otras casas que son todas de madera, si un vecino tuvo que limpiar los matorrales de ahí al frente porque está totalmente abandonado el pobre hombre. No tiene a nadie."
El vecino del que habla la señora Isabel es Juan Murúa Sánchez que, al igual que el resto de los pobladores, movido por la preocupación y la compasión ante el abandono de un hombre mayor enfermo, también ha decidido hacerse parte con lo que esté a su alcance para colaborar.
Peligro
"Lo que pasa es que al abuelito solo es un peligro para él mismo porque está enfermo y abandonado. Aquí a su casa entra cualquier persona y yo mismo corté todos los matorrales, saqué todo el pasto que estaba aquí en el frente de su casa, donde antes los vecinos ya habían sacado basura, porque todo eso a la larga le hace mal al caballero, pero también es peligroso para las otras casas poque si eso la agarra el fuego, se va a quemar la casa de don Armando, pero se pueden quemar todas las otras casas también. Y como el hombre está abandonado, no queda otra que los mismos vecinos hagan lo que puedan, si aquí hay vecinas que hasta la comida le dan al pobre viejo", contó Juan Murúa.
La impotencia y la desesperación se mezclan en las palabras de estos vecinos, quienes han visto cómo Armando, alguna vez rodeado de familia y amor, ahora languidece en la oscuridad de la negligencia y el olvido.
Y aunque se han hecho esfuerzos por brindarle ayuda, las gestiones parecen no ser suficientes para rescatarlo de su triste destino.
Encontrar un Cupo
"La presidenta de la junta de vecinos informó de este tema a la municipalidad porque cuando uno llama a la ambulancia porque está mal, la ambulancia no viene si no hay una persona que esté con él y yo no puedo estar y si no hay alguien no vienen. Entonces nos dijeron que lo que hay que hacer es buscarle un cupo en algún lugar, en alguna institución que pueda acogerlo", explicó con un tono de mucha preocupación Nancy Pizarro.
Mientras tanto, Armando espera en su soledad, aguardando la mano amiga que le devuelva la dignidad y la esperanza que tanto merece.
Este caso, es finalmente un recordatorio angustiante de la fragilidad de la vida humana y la importancia de la solidaridad y el cuidado mutuo en nuestra sociedad.
"Como el hombre está abandonado, no queda otra que los mismos vecinos hagan lo que pueden, si aquí hay vecinas que hasta la comida le dan al pobre viejo",
Juan Murúa Sánchez, Vecino de Plantación Fiscal