Así fue la última "carrera" del querido taxista Pedro Escalante
Familiares, autoridades locales y un centenar de amigos despidieron a este Hijo Ilustre de San Antonio.
La parroquia Santa Luisa de Marillac estaba repleta. Familiares, autoridades locales, dirigentes y amigos no se quisieron perder el último adiós a Pedro Salvador Escalante González, quien falleciera el reciente sábado producto de su avanzada edad y aquejado de sus pulmones.
El hombre, que había cumplido 90 años, dejó de existir en su hogar ubicado en Villa Las Dunas y en compañía de sus seres queridos. Tras ser velado en la funeraria Belén, ayer se realizó una misa en el recinto de Barrancas donde unas 150 personas despidieron a este querido taxista e Hijo Ilustre de San Antonio.
Junto a su esposa Gladys Erazo, fallecida hace 14 años, tuvieron ocho hijos y muchos nietos que no olvidarán a este padre, abuelo, bisabuelo y amigo.
Precisamente su nieto Alfonso Pérez (19) lo recuerda como una gran persona que siempre estuvo dispuesto a ayudar a quien lo necesitara.
"Fue el mejor abuelo y padre que pude tener. Siempre estuvo cuando lo necesité, nunca me dejó solo y fue la mejor persona que yo pude tener a mi lado. Yo compartía con él todos los días porque vivíamos juntos y siempre conversábamos. Me va a hacer mucha falta", comentó entre lágrimas.
Vacío
La esquina de Arturo Prat con Centenario ya no será la misma sin Pedro Escalante y su taxi.
Por 70 años, en esta intersección, este sanantonino comenzaba su jornada laboral movilizando a uno que otro vecino de la comuna o turista que necesitaba transportarse rápidamente y con una buena conversación.
De acuerdo a los discursos de sus familiares y amigos, Escalante era un fanático empedernido de conversar, colaborar, amigo de sus amigos, pero con carácter.
El concejal Fernando Núñez compartió durante varios años con este sanantonino cuando él militaba en el Partido Socialista.
"Yo lo conocí cuando ingresé al partido a los 14 años. Era un hombre con una paciencia única y uno se daba cuenta que tenía la confianza de todos. Cada vez que se presentaba un problema interno, él era llamado para que solucionara los inconvenientes. Sin duda que fue un ejemplo debido a su enorme lucha dirigencial por los taxistas", añadió.
Pero no solo la política era su pasión. La pesca deportiva y recreativa llenaba también su corazón y por años perteneció al Club de Caza y Pesca Los Gavilanes.
José Ruiz, quien fuese presidente por 12 años de la institución, lo recordó como "una persona maravillosa por su entereza y por querer hacer las cosas lo antes posible. Muchas veces tuvimos discusiones por la forma de hacer las cosas, pero es normal como en todos lados. Más que dirigente yo me quedo con el recuerdo de un amigo".
Tras la misa, su restos fueron llevados hasta el cementerio Parque del Sendero, donde, finalmente, concluyó su último recorrido en esta vida.
2010 fue el año en que Pedro Escalante fue erigido como Hijo lustre de San Antonio.