El feroz crimen en contra de una mujer de 35 años que era madre de cuatro hijos ayer tuvo un culpable.
La terna de jueces del Tribunal de Juicio Oral en lo Penal, encabezada por el magistrado Claudio Espinoza, encontró a Marcelo Andrés González Castro culpable de haber asesinado a Mónica Cerda Pino.
El tribunal ayer realizó la lectura de condena donde expresó que era posible acreditar la participación de Marcelo González en el homicidio de la artesana.
Se logró establecer que la noche del 21 de septiembre de 2013 ambos se habrían encontrado en un sitio eriazo de calle Baquedano, en Llolleo. Ahí el acusado se abalanzó en contra de la víctima, provocándole severas lesiones. Ella resultó con fracturas en el cráneo que le costaron la vida.
Los jueces manifestaron que Marcelo González Castro es el autor en el homicidio simple de la mujer, dado que existe una serie de evidencias que lo posicionan en el lugar del crimen, como que su teléfono celular estuviera en manos de la mujer asesinada y que hubiese restos de su ADN en el sitio del suceso.
El fiscal a cargo de la investigación, Álvaro Pérez, expresó que el Ministerio Público solicitará 10 años de prisión para el acusado. En cambio la defensa, a cargo Alejandro García, solicitó que se le otorguen 3 años y un día de libertad vigilada. La sentencia emitida por el Tribunal Oral se conocerá el próximo lunes a las 15.15 horas.
Crimen
El asesinato de Mónica Cerca Pino ocurrió el último día de celebraciones de las Fiestas Patrias de 2013. Entonces, la mujer de 35 años salió para compartir con unos amigos.
Cuando regresaba a su hogar, cerca de las 23 horas, "acortó" camino por un sitio eriazo que se encuentra detrás del Instituto del Puerto y el cual usan varias personas para llegar a la población Baquedano 2. Fue ahí cuando se encontró con el hombre que la asesinó.
La muerte de Mónica Cerda provocó un gran impacto en la parte alta de Llolleo, sobre todo porque era madre de cuatro hijos y cuando falleció la menor tenía apenas 5 meses de vida.
Ante los jueces se expuso precisamente este punto, puesto que el daño de asesinar a la mujer se hizo extensivo a sus hijos que crecerán sin su madre. Los niños están a cargo de sus abuelos. J
l El Tribunal de Juicio Oral determinó que el acusado actuó, al asesinar, sin un completo control de su actuar.
El fiscal Álvaro Pérez explicó que "dos médicos siquiatras y un sicólogo, de acuerdo a sus pericias realizadas al acusado, generó que el tribunal determine que éste, al momento de actuar, lo habría hecho con una imputabilidad disminuida que significa que no mantenía completamente el control sobre sus actos (...) Con ello podría eventualmente suceder que la pena para el homicidio se vea disminuida, pero la Fiscalía persistirá en solicitar 10 años de pena. El tribunal si lo estima, puede no disminuir la pena solicitada", aclaró.
