Mortal atropello en Barros Luco puso fin a linda historia de amor entre dos abuelitos
Ana Vargas (69) falleció y su marido Augusto Aldunate (70) está en riesgo vital. Luego de 22 años separados habían vuelto a pololear. Andaban paseando cuando ocurrió el accidente.
Con maniobras de reanimación en medio de la avenida Barros Luco funcionarios del Samu y bomberos intentaban salvarle la vida a una abuelita que junto a su marido acababan de ser atropellados por una motocicleta.
Pese a los esfuerzos desplegados, Ana Luisa Vargas Vargas (69) falleció en el hospital Claudio Vicuña la noche del viernes pasado y su esposo Augusto Aldunate Parra (70) se encontraba, al cierre de esta edición, al borde de la muerte internado en la unidad de Emergencia Adulto del Carlos van Buren de Valparaíso.
El matrimonio iba cruzando cuando fueron impactados por la moto Suzuki que conducía un joven de 22 años, el que, según el primer informe policial, manejaba a exceso de velocidad. Se indaga si se saltó la luz roja del semáforo. El alcotest arrojó que no había consumido alcohol.
Ayer el cuerpo de la abuelita fue entregado a sus seres queridos, momento en que sus hijos revelaron la tierna historia de amor que tenía la pareja.
"Esto (accidente) terminó con la felicidad de mis papás. Ellos estaban felices y merecían tener más años juntos. Tenían todo para comenzar a ser felices otra vez", comentó Octavio Aldunate, uno de los tres hijos de la pareja.
Ana Luisa y Augusto se casaron en San Antonio cuando eran jóvenes, pero que por motivos personales decidieron separarse. 22 años después quisieron darse otra oportunidad en el amor.
"Después de todos estos años estaban como pareja de nuevo. Mi mamá venía a buscarlo a San Antonio y se iban juntos a Santiago (donde residían). Estaban pololeando de nuevo. Estaban muy felices", confidenció Octavio con gran tristeza.
Ana Vargas era oriunda de San Antonio y siempre venía a visitar a todos sus familiares del cerro Placilla. La noche del viernes llegó para reunirse con su marido y juntos andaban paseando por Barros Luco cuando ocurrió el trágico atropello.
Pidió disCulpas
Ayer, a la misma hora en que el cuerpo de Ana Luisa Vargas era entregado a sus seres queridos en el Servicio Médico Legal, se realizaba la formalización de cargos en contra del piloto de la motocicleta que arrolló a los adultos mayores.
En la audiencia, la fiscal Karina Franco formalizó cargos al piloto por cuasidelito de homicidio cometido contra Vargas Vargas y por el delito de lesiones graves que le ocasionó a Aldunate Parra.
El imputado, Boris F.R., quedó en libertad y con la medida cautelar de firma semanal y arraigo nacional.
Al salir del tribunal el motociclista pidió perdón. "En serio, que me disculpe la familia", dijo escuetamente.
Respecto a las palabras del autor del atropello, Josei, otro hijo de Ana y Augusto, opinó: "Yo no le deseo el mal, pero si le gusta andar rápido (conduciendo) que sea hombrecito, que asuma lo que haya que asumir y que pague lo que tenga que pagar, que reflexione".