El sanantonino que hizo historia jugando por los míticos Panzers
A fines de la década del '60, Fernando Osorio Cabello fue contratado por Santiago Wanderers para reforzar al plantel que había salido campeón.
En el mejor momento de su carrera futbolística, el jugador Fernando Osorio Cabello, nacido el 31 de diciembre de 1946, en San Antonio, fue contratado por Santiago Wanderers -tras coronarse campeón del torneo nacional de 1968- para reforzar el plantel caturro a fin de disputar por primera vez la Copa Libertadores de América.
Lo consigna el libro "Los Panzers del Puerto 1968-1969", del periodista Carlos Campos Castro, que fue editado en recuerdo a la hazaña del club playanchino.
Rápido delantero
De Osorio, se ilustra que "como infantil jugó en el club Lauro Barros para luego pasar a Unión Placilla Matadero, ambos del campo amateur sanantonino. En 1962, integra la Selección Juvenil de San Antonio. Al año siguiente asiste a una prueba en Colo Colo donde no lo consideran".
El joven delantero no se amilanó y "portando su bolso con equipamiento, parte a veranear a Graneros, cerca de Rancagua, teniendo la oportunidad de probarse en O'Higgins. Pasa exitoso la prueba, incorporándose al club con un contrato de 40 escudos mensuales, cuando tenía 16 años. Fue recomendado por José "Gallego" Pérez, quien lo hace debutar en el primer equipo el año 1963".
Allí estuvo seis temporadas destacándose como un rápido puntero, indistintamente por derecha o izquierda con llegada de gol, atributos que aprecia el entrenador Donato Hernández, quien lo trajo a Valparaíso como refuerzo para la Copa Libertadores de América, tras tener una brillante actuación al reforzar a Universidad de Chile en el Torneo Hexagonal de verano, club que también lo pretendía".
Lo llamativo de esta referencia, es que José "Gallego" Pérez fue el entrenador del equipo campeón de "los panzers", pero al término del torneo se fue a Deportes Concepción, institución con la que tenía un acuerdo desde hacía varios meses, lo cual causó gran molestia en Wanderers.
Gran actuación
El comentario anterior apunta a resaltar a una figura como Fernando Osorio, que descolló en Wanderers jugando en la Libertadores y en la temporada oficial de 1969, y que brilló después en Colo Colo, Lota Schwager, Rangers y Trasandino de Los Andes, terminando su periplo en el club de Playa Ancha.
Según el autor del libro, "los panzers" responde a una denominación que surgió de los periodistas deportivos del diario La Estrella de Valparaíso, imponiéndose a "verde como los pinos" y "soy de pancho gancho" que voceaban a la par los hinchas.
Esta valiosa edición histórica recuerda a una oncena estelar integrada por Juan Olivares; Manuel Canelo, Vicente Cantatore, Manuel Ulloa, Eduardo Herrera; Luis Acevedo, Elvio Porcel de Peralta; Juan Alvarez, Roberto Bonano, Mario Griguol y Reynaldo Hoffmann, bajo la dirección de José Pérez.
Para envidia de hoy, en aquel tiempo el clásico Everton-Wanderers jugado en Viña del Mar, registraba el ingreso de 22 mil espectadores, mientras en Playa Ancha se jugaba hasta con 21 mil asistentes. En las reuniones dobles en el Estadio Nacional, el equipo caturro se presentaba ante 72 mil personas. Para qué decir los 80 a 100 vagones del tren que llevaba a los hinchas verdes a la capital. Pero lo más maravilloso, fueron los cien mil porteños que recibieron a los campeones en las calles de Valparaíso.
El libro entrega datos interesantes de cada jugador de la época, estadísticas de los partidos jugados, los goles cantados por el relator Hernán Solís que fueron grabados en un disco de vinilo, el historial de la camiseta y un sinnúmero de fotografías y comentarios de periodistas de la época como Julio Martínez, Antonio Vera, Edgardo Marín y otros con los seudónimos de Míster Huifa y Don Pampa.
Las desaparecidas revistas "Estadio" y Gol y Gol" enriquecen el potencial periodístico de este libro, en que también aparecen comentarios de wanderinos como el cantante Fernando Ubiergo, quien señala que "ser porteño y de Valparaíso, es ser doblemente chileno".