Catalina Muñoz Lizama

La panadería Espiga de oro (calle Maestranza 1551, Barrancas) tiene una larga trayectoria de más de 40 años en la comuna de San Antonio y, por lo mismo, sus dueños han querido aportar a la comunidad con repartos a domicilio para mayores de 75 años.

Desde la semana pasada y para ir en ayuda de los cientos de abuelitos que residen en el sector de Barrancas, comenzaron con un sistema de despacho a domicilio sin costo adicional. Ello, considerando la ordenanza que señala que los adultos mayores desde los 75 años deben realizar cuarentena obligatoria para prevenir el contagio de covid-19.

"Donde está ubicada la panadería viven personas de la tercera edad que muchas veces son matrimonios o viven solitos. Ellos están acostumbrados a comprarnos pan a nosotros. A muchos los conocemos hace muchos años, por lo mismo cuando se decretó la ordenanza quisimos ir en su ayuda para que no se preocuparan del pan", indicó Angélica Meza, administradora del local.

Durante los últimos días la panadería ha recibido muchos llamados para encargar pan, sin embargo, el equipo de reparto se encuentra en un periodo de marcha blanca, por lo que, hasta el momento, solo realizan entregas en sectores cercanos, hasta poder encontrar la forma de expandirse a otros barrios.

"A lo primero que hemos apuntado es al mismo sector donde está la panadería, también hemos abarcado Villa Italia, Cerro Arena y cerca del supermercado Lider por avenida Barros Luco. De todos modos, le hemos explicado a algunos clientes que estamos en una marcha blanca y que esperamos acomodarnos para así abarcar quizás toda la comuna, incluyendo zonas como Llolleo o San Antonio centro", agregó Meza.

Devuelta de mano

Según cuentan en la panadería, este beneficio ha tenido una muy buena recepción entre los clientes e incluso han sido contactados por hijos de adultos mayores que no pueden ir a visitarlos.

"Cuando publicamos esta iniciativa en nuestra página de Facebook, la gente nos comenzó a contactar de inmediato. Varios eran también hijos de adultos mayores de la comuna o de sectores aledaños. Incluso hubo personas que nos contactaron del sur para que pudiéramos llevarles pancito a sus seres queridos. Esto, además, es súper gratificante para nosotros. La gente nos ha premiado durante tantos años con su preferencia y hoy es momento de devolverles la mano a nuestros clientes más antiguos y así también protegerlos", sostuvo Meza.

Otro de los puntos que ha sido muy agradecido por quienes optan por este servicio es que no existe un cargo adicional por el despacho del producto. Priorizan, además, el pago a través de transferencia.

"Como tratamos muchas veces con adultos mayores que nos contactan ellos mismos y no saben cómo funciona el tema de la transferencia, les pedimos que nos paguen con la plata justa. De esta manera no tenemos que entregar vuelto y les avisamos antes cuánto sale su pedido para que tengan el dinero cuando nosotros llegamos. Tomamos todas las medidas de seguridad necesarias que ha establecido la autoridad sanitaria. El pan va en bolsa de papel y después en una de plástico. La ponemos en una de las cajas de productos de la panadería y el mismo cliente la saca. De esta forma, evitamos aún más el contacto. Nosotros solo pedimos que la gente nos contacte temprano y tenga paciencia", explicó la administradora.

Los pedidos de adultos mayores, desde los 75 años, se efectúan durante la mañana, ya que el reparto se realiza entre las 15.00 y las 17 horas, de lunes a sábado.

Los números de contacto son 352212309 y +56989152894.

75 años es la edad mínima para acceder gratuitamente a este servicio de la panadería.