Juan Gilberto Hernández O.
"La pandemia remata la desaparición de los rituales. (…) Los rituales son en el tiempo lo que una vivienda es en el espacio. Hacen habitable el tiempo, como si fuera una casa. Ordenan el tiempo y de este modo hacen que tenga sentido para nosotros. El tiempo carece hoy de una estructura firme. No es una casa, sino un flujo inconstante".
Esta explicación del prestigioso filósofo surcoreano alemán Byung-Chul Han sobre la importancia de los rituales para las personas, y el daño que la pandemia, con su incertidumbre y temor, ha causado en los ritos, permite tener una idea del duro momento que como sociedad estamos atravesando.
¿Y no es acaso la despedida de un ser querido uno de los rituales que más respetamos y al mismo tiempo necesitamos las personas?
Sin duda.
Por eso es comprensible el dolor de muchas familias que, en plena pandemia y en medio de la cuarentena que rige sobre la comuna de San Antonio, han sido privadas del ritual de despedida de alguno de los suyos. Porque ya la emergencia sanitaria restringió los velorios y funerales al mínimo posible de personas, lo que en el caso de la cuarentena implica que los deudos simplemente deben pasar por alto el velorio y durante el mismo día llevar al fallecido a un cementerio.
El miércoles de esta semana Pilar Sprönhle, coordinadora de la Secretaría Regional Ministerial de Salud para las funerarias de la zona, informó a los empresarios del rubro que "en cuarentena territorial (comuna San Antonio de momento) no puede existir velatorio en ningún caso, covid o no covid".
Tema complejo
Carlos Fuentes, funcionario de la funeraria Belén, lleva varias décadas en este servicio. Sobre la suspensión de los velorios, comentó a Diario El Líder que "este es un tema muy complejo porque hasta marzo los familiares podían despedir a su ser querido, hacer los velorios y los funerales como siempre había sido. Desde entonces se empezaron a restringir los velatorios, también los horarios y la cantidad de personas en los funerales. Y llegamos ahora al primero de julio donde se hace valer la cuarentena, y los velorios se suspenden totalmente".
Sobre cómo asumen las personas esta restricción, Fuentes explicó que "es muy difícil enfrentar a la familia que ya viene con un tremendo dolor y más encima nosotros como funeraria tenemos que decirle que su ser querido tiene que permanecer en la casa o en el hospital hasta que ustedes resuelvan el trámite de sepultación con el cementerio. Antes de eso hoy día no podemos hacer nada, ni llevarlo a la funeraria, ni velarlo en la casa, ni que le pongan una flor, nada de eso. Este es un tema muy duro para nosotros porque sabemos que las personas ya están pasando por un momento muy difícil y venimos nosotros y les originamos otro problema".
Nada de nada
Desde la funeraria Hermanos Tobar, Gerardo Tobar también relató que "la gente lo toma muy mal porque lo compara con lo que ha pasado en los últimos días. Muchas personas entendieron que no se puede asistir a velorios, y lo que ocurre es que no se pueden hacer velorios como tampoco asistir a los funerales. Es muy complejo, muy difícil trabajar así porque nosotros estamos acostumbrados a tener otro trato con la gente, porque es un momento muy difícil despedir así a un ser querido. Por más que uno trate de conformarse con que esto es un bien común por los contagios, las familias no se resignan".
Sobre este punto, Gerardo Tobar fue más lejos y afirmó que "hoy día mismo (ayer) tenemos un caso de una persona que la dejamos en el domicilio dentro de la urna, con un carro, sin luces ni nada. O sea, lo dejamos en la casa esperando que la gente haga el trámite en el cementerio y lo tenemos que sepultar durante el mismo día".
Por su parte, Carlos Fuentes también aprovechó de poner énfasis en que esta medida rige solamente por la cuarentena que afecta a San Antonio. "Esto pasa solamente en San Antonio, no en Cartagena, El Tabo ni en Santo Domingo. Esto que nos han instruido es solamente para San Antonio mientras dure la cuarentena. Los fallecidos por covid deben ser sepultados en un lapso de tres horas y el resto -por la causa que sea- deben ser inhumados durante el mismo día porque nosotros ni nadie se puede saltar la instrucción que nos dio el Ministerio de Salud".
"Este es un tema muy duro para nosotros porque sabemos que las personas ya están pasando por un momento muy difícil",
Carlos Fuentes