La historia del bombero que aparece en la foto con Allende y Neruda en San Antonio
Fue uno de los pioneros de Villa Las Dunas, se llamaba Celedonio Cruzat y falleció en 1993 a la edad de 73 años sin sospechar de la inusitada fama que le daría aparecer en uno de los símbolos del triunfo de la Unidad Popular.
"Les digo que se vayan a sus casas con la alegría sana de la limpia victoria alcanzada. Esta noche, cuando acaricien a sus hijos, cuando busquen el descanso, piensen en el mañana duro que tendremos por delante, cuando tengamos que poner más pasión, más cariño, para hacer cada vez más grande a Chile, y cada vez más justa la vida en nuestra patria".
Con estas palabras, Salvador Allende celebró su triunfo en las elecciones presidenciales la noche del 4 de septiembre de 1970, hace exactos 50 años. Meses antes, en su recorrido por Chile, el candidato del Partido Socialista había visitado el puerto de San Antonio y justo frente al actual edificio de la municipalidad se realizó la concentración que contó con la participación de miles de personas.
En ese mismo lugar fue tomada una de las fotografías que con el paso de los años se transformó en uno de los símbolos de la campaña de la Unidad Popular en su carrera presidencial. En la imagen se puede ver al Premio Nobel de Literatura, Pablo Neruda, abrazando a Salvador Allende y justo detrás del candidato se ve el rostro de un sanantonino de prominente bigote.
Se trata de Celedonio Cruzat, militante del Partido Radical, voluntario de la Primera Compañía de Bomberos de San Antonio, dirigente del Club de Ciclismo Chacabuco de Llolleo, ferviente defensor de las ideas que llevaron a Salvador Allende a convertirse en Presidente de Chile.
Claro que Celedonio Cruzat apenas alcanzó a conocer de la fama que cobraría esta fotografía, ya que muchos años después de su muerte, su hijo Jaime, lograría hacerse de una copia que hasta la fecha guarda como un verdadero tesoro.
Desde su casa en el balneario de Las Cruces, el profesor Jaime Cruzat, a la fecha de 69 años, relata con su voz cansada por el tiempo, cómo fue que se hizo de la preciada imagen que retrató a su padre junto al Presidente Allende y al poeta Pablo Neruda.
"Mi papá había fallecido hace varios años, y un día andando por San Antonio encontré esa foto en la imprenta que está ahí en Barrancas, al lado de la municipalidad en toda la esquina (Barros Luco con El Molo) y de pronto miro la foto y me doy cuenta que es la foto donde sale mi papá porque hasta entonces yo solamente tenía una revista donde salía esa imagen. Fue una sorpresa repentina ver que ahí estaba esa foto donde sale mi padre con Salvador Allende", cuenta el profesor jubilado sobre su inusual hallazgo.
Concentración en Barrancas
Justo cuando Allende vino a San Antonio, don Jaime no pudo acompañar a su papá y recuerda que "como él era radical de los antiguos, vivía por su partido y se involucraba en todos los temas de acción política, así que no es raro que estuviera ahí; por eso es tan importante la foto porque es un lindo recuerdo de esa lucha que se dio, pero al mismo tiempo es muy triste recordar todo lo que pasó después".
El día de la concentración en Barrancas la sanantonina Alejandra Díaz Lobos acompañó a su madre Olga Lobos que estaba comprometida con la campaña de Allende y recuerda que "aunque estaba chiquitita me acuerdo que eran miles de personas. Estaba todo Barrancas lleno y me acuerdo clarito porque mi mamá quería llegar hasta donde estaba Salvador Allende y no pudimos, lo más cerca que estuvimos fue de Neruda y lo sé porque casi me caigo y me agarré de su poncho para no ir a dar al suelo"
Cumplidos 50 años del triunfo en las elecciones de Salvador Allende, el profesor Jaime Cruzat dice que la imagen en la que aparece su padre "es una foto que atesoro mucho porque es un gran recuerdo. Con los años me provoca muchos sentimientos encontrados, es difícil de explicarlo porque da mucha tristeza ver a mi padre ahí porque él siempre fue un hombre muy comprometido con las causas sociales, si de hecho era bombero de la Primera Compañía y le tocó estar en un incendio muy grande que hubo a principios de los sesenta en una barraca de maderas en Llolleo".
"Estaba todo Barrancas lleno y me acuerdo clarito porque mi mamá quería llegar hasta donde estaba Salvador Allende y no pudimos",
Alejandra Díaz.