Juan Gilberto Hernández o.
Ya se cumplieron dos semanas de infructuosos rastreos para dar con el cuerpo del venezolano Henry José Peralta González, de 35 años, que la tarde del viernes 18 de septiembre cayó al mar desde los acantilados frente al Parque Cantalao en la localidad de Isla Negra, en la comuna de El Quisco.
Prácticamente desde el momento mismo del accidente se activó un operativo de búsqueda y rescate que durante los primeros días se complicó por las malas condiciones del mar. Con el apoyo de la lancha LPM-4405 de la Capitanía de Puerto de Algarrobo, el bote "Bonita" del Sindicato de Pescadores de El Quisco, equipado con un compresor para buceo semiautónomo, dos motos de agua, junto a más de 25 buzos de la Brigada Operativa de Emergencia y Rescate (Boer) de Cartagena, y del Grupo de Rescate Anfibio de San Sebastián, se desarrollan los rastreos que se han mantenido hasta la fecha sin resultados.
"muy duro"
A nombre de la Brigada Operativa de Emergencia y Rescate, la voluntaria Fanny Zúñiga afirmó a Diario El Líder que "se ha hecho un esfuerzo muy grande por buscar a este joven que era padre de una niñita de apenas un año tres meses. Ha sido muy duro ver a su mujer perder y recuperar las esperanzas en todo este tiempo. Por eso necesitamos apoyo para seguir buscando porque nuestros voluntarios han trabajado durante dos semanas con recursos propios, y pasado todo este tiempo se hace muy difícil mantener los operativos".
Según la representante del Boer, "cualquier ayuda nos serviría para poder ayudar a esta familia, a esta madre desesperada que busca el cuerpo del padre de su hija, porque, aunque es muy duro decirlo, ya todos sabemos que lo que buscamos es un cuerpo. Pero si esta búsqueda le da tranquilidad a esta mujer que está sufriendo todo esto en un país que no es el suyo, tenemos que mantenerla, porque, como dije antes, ha sido muy duro ver el sufrimiento de esta familia que ve que cada día que pasa se busca menos".
Ayuda
Fanny Zúñiga hizo un llamado a "cualquier empresa o particular que nos pueda colaborar con combustible nos ayudaría demasiado. Lo otro es que si hay alguien que pueda colaborar con una embarcación para apoyar el trabajo de los buzos desde el mar, también serviría mucho, porque es verdad que los pescadores han ayudado todo lo que pueden, pero ellos también tienen que trabajar y no pueden tener uno o varios botes todo el día apoyando en la búsqueda".
Añadió que "la familia con recursos propios logró conseguir un robot para buscar en la zona donde ocurrió el accidente, pero el trabajo de ese robot se hizo muy complejo ya que trataron de meterlo al agua desde los roqueríos y las marejadas complicaron mucho esa maniobra. En ese caso, haber tenido un bote habría sido de mucha ayuda, por eso es que como organización apelamos a quienes nos puedan ayudar para mantener las labores de rastreo y no dejar sola a esta familia".
En los operativos, además de los recursos ya mencionados con despliegue de fuerzas en tierra, mar y aire, han trabajado voluntarios del Cuerpo de Bomberos de El Quisco, drones y aeronaves navales. Junto a ellos ha sido indispensable el trabajo de los buzos voluntarios del Grupo de Rescate Anfibio de San Sebastián y de la Brigada Operativa de Emergencia y Rescate de Cartagena.
18 de septiembre Henry Peralta fue arrastrado por una ola en los acantilados del Parque Cantalao, en El Quisco.