Nicolás Labra G.
Italia se queda en Londres para disputar el domingo (15.00) la final de la Eurocopa, nuevamente en Wembley, a la espera de la otra semifinal de hoy entre Inglaterra y Dinamarca, tras eliminar en una ajustada definición a penales a España por 4-2, después del 1-1 en los 90 minutos.
Fue un partido que no premió a los hispanos, más incisivos en largos pasajes del encuentro, dominantes en la ofensiva con notables partidos del joven volante Pedri y el puntero izquierdo Dani Olmo. "Lo de Pedri con 18 años no se lo he visto hacer ni a Andrés Iniesta", dijo a modo de consuelo Luis Enrique tras el encuentro.
España obligó a Italia a volver a esas cuestionadas raíces del fútbol defensivo y dejar de lado su versión propositiva de todo el torneo. En ese choque de fuerzas parejas, ambos equipos tuvieron dos chances claras en el primer tiempo.
Parecía que España saldría a finiquitar su faena en el segundo lapso, pero golpeó primero la Azzurra con un golazo de Federico Chiesa, el más eléctrico del ataque azul. No se quiso amilanar la "Furia Roja" y el DT acertó con los cambios, por lo que Álvaro Morata, criticado en la fase de grupos, anotó tras una pared con Olmo, llevando la llave al tiempo extra.
Allí tanto el nerviosismo como las piernas cansadas hicieron efecto y poco se jugó comparado a la intensidad de los primeros 90 minutos.
En la tanda parecía que España nuevamente tenía todo listo después de que Manuel Locatelli fallara el primer penal, atajado por Unai Simón, pero acto seguido Dani Olmo mandó el disparo sobre el travesaño. Anotó Andrea Belotti, Gerard Moreno, Leonardo Bonucci, Thiago y Federico Bernardeschi hasta que falló Morata, tapado su suave disparo por Gianluigi Donnarumma. Jorginho, en cambio, selló el 4-2 con un tiro delicado.
"Le doy las gracias a los jugadores porque siempre han creído. Nos falta el último pasito y tenemos que recuperarnos porque fue un partido muy exigente", dijo el DT italiano Roberto Mancini. "Hemos sido un equipo de principio a fin, les pongo un sobresaliente", respondió Enrique.
"Esta victoria la dedicamos a (Leonardo) Spinazzola", dijo Chiesa, elegido la figura del partido. Italia tuvo la música de Raffaella Carrà en el calentamiento previo al partido y anoche seguro que la volvieron a escuchar en su celebración. "Qué fantástica esta fiesta" para la Azzurra.
