David Muñoz Castillo
La muerte se ensaña con el club Cóndor. El pasado 1 de julio la institución del cerro Placilla perdió al último socio fundador: Oscar Acuña Valdés falleció a los 93 años producto de una serie de enfermedades derivadas de su larga existencia.
Ahora la tristeza se propaga nuevamente entre las huestes condoritas. Uno de sus socios más queridos perdió la vida en la jornada del domingo.
René Pinto Marambio, jugador en el pasado y el canchero de las instalaciones en la calle Ortúzar, no pudo soportar las consecuencias que el maldito virus del covid-19 dejaron en su organismo.
Luego de una semana internado en el hospital Claudio Vicuña fue trasladado al hospital Naval de Viña del Mar. Después de más de un mes de lucha, dejó de existir a los 73 años y provocó la desazón en la familia del club deportivo Cóndor, que ayer lo lloró y despidió con una emotiva ceremonia en la misma cancha sintética que cuidó y administró por años.
"Nos harás mucha falta viejo René, no sabes cuánto te extrañaremos en la cancha y en tu sede que tanto querías y cuidaste", expresaron los "Condoritos de Corazón", en las redes sociales de la institución.
Otro mensaje decía "vuela alto, tan alto como un cóndor, que allá te espera tu hermano Gerardo, tu padre, tu amigo Vichoco y todos tus amigos que ya partieron. Todo Placilla te llora sin importar la camiseta".
Y efectivamente el populoso sector lamentó la pérdida. Incluso los archirrivales en la cancha se hermanaron en el dolor. El Unión Placilla solidarizó en este difícil momento. "Se ha marchado una gran persona, padre abuelo y vecino. Adiós don René Pinto", postearon los "chunchuleros" en su Facebook.
Portuario
René Pinto nació y se crió en el cerro Placilla, y trabajó por 25 años en la Empresa Portuaria de Chile, Emporchi, hasta que se jubiló y se dedicó por completo al club.
Formó una familia con Josefina Pinto Toro. Tuvieron tres hijos: Jacqueline, María y Francisco.
Además, dejó ocho nietos, siete bisnietos y a su madre de 105 años, Irma Pinto Marambio.
Brazo derecho
Raimundo Díaz, el tesorero del Cóndor, estaba triste, porque el club no solo perdió a un gran hombre y socio, sino que a uno de sus pilares fundamentales. "Se nos fue nuestro canchero", lamentó el dirigente.
El exjugador lo recuerda desde su infancia. "Lo vi jugar en todas las series, era lateral derecho, jugó toda la vida en el club", rememoró sobre el hombre que nació y se crió en el cerro Placilla.
Su partida la siente Raimundo Díaz, porque explicó que René Pinto "era mi brazo derecho. El controlaba y barría la cancha, hacía el aseo de los camarines, abría el recinto. Tenía una voluntad única, nunca decía que no. Lo siento mucho, porque era un hombre muy cariñoso".
El tesorero recordó el compromiso que tenía con la institución. "Cuando iniciamos el gran proyecto de la sede, él nos ofreció su casa para que nos juntáramos, porque no teníamos dónde reunirnos. Así era su compromiso, de verdad que era un condorito de corazón", valoró.
Ayer una caravana acompañó los restos de René Pinto desde Viña del Mar hasta la sede del club en Placilla, donde un centenar de personas lo esperaba. "Estoy orgulloso de mi barrio, por cómo despiden a René, un hombre muy cariñoso", resaltó Miguel Díaz, socio y miembro de una de las históricas familias condoritas, quien le dedicó unas palabras frente a la multitud.
La familia de René Pinto, ante la masiva despedida brindada por los socios, hinchas y vecinos del cerro Placilla, dijo que "esto es lo que cosechó. Le agradezco a todos por esta despedida", expresó su hija Jacqueline. emocionada hasta las lágrimas
En la calle, frente a la sede le dedicaron "Cuando un amigo se va" de Alberto Cortez, en una emotiva ceremonia. Con globos blancos y negros que se elevaron al cielo, fuegos artificiales y discursos le dijeron adiós a René Pinto, quien fue sepultado en el cementerio Parque de Bellavista.
"Tenía una voluntad única, nunca decía que no. Lo siento mucho, porque era un hombre muy cariñoso",
Raimundo Díaz,, tesorero del club Cóndor