Restaurantes se preparan para abrir el fin de semana después de 5 meses
Con el avance de San Antonio a fase 3 se acabaron las cuarentenas de fines de semanas y festivos. Los establecimientos del rubro gastronómico pueden atender público.
La última vez que los negocios del rubro gastronómico de San Antonio atendieron público un fin de semana fue el sábado 13 y el domingo 14 de febrero. El 20 de ese mes se decretó el retroceso a Transición en la comuna y desde esa fecha la ciudad navegó en el plan Paso a Paso entre cuarentenas y la fase 2 del programa de desconfinamiento del Gobierno.
Con el avance a Preparación de la capital provincial, que comenzó a regir ayer, se entregan más libertades "como mayor movilidad, ampliar aforos y la posibilidad de asistir a lugares públicos en espacios tanto abiertos como cerrados", como se lee en el nuevo plan Paso a Paso, que pone énfasis en la vacunación.
Además, se acaban las cuarentenas los fines de semana y festivos, y eso le permite a restaurantes, pubs y otros negocios asociados a este sector atender público. Y como el toque de queda ahora parte a la medianoche en la Región de Valparaíso, las expectativas son enormes. Quienes trabajan en los establecimientos gastronómicos esperan que comience el repunte definitivo de un rubro que desde octubre de 2019 viene funcionando a intervalos.
Jéssica Menares, del restaurante de comida peruana Huachano de Barrancas, contó que "abrimos de lunes a sábado, tendremos un día más para atender, porque los últimos meses han sido muy malos para nosotros. Somos el rubro más golpeado y eso de estar abriendo y cerrando nos ha perjudicado", explicó la trabajadora del establecimiento ubicado en Uno Norte.
Mientras atendía la caja del negocio adelantó que "nuestra idea es aprovechar la fase 3 y abrir hasta tarde, porque atrasaron el toque de queda. La gente tiene ganas de salir. Atendemos adentro con el pase de movilidad, si no lo tiene puede consumir afuera", advirtió.
Jéssica Menares expresó que "necesitamos trabajar. Los arriendos igual hay que pagarlos y no los bajan, aunque estemos cerrados".
La locataria del establecimiento de "comida pop peruana" llamó a los sanantoninos a preferir los negocios de su ciudad. "Muchos se van para la costa, pero acá también tenemos buenos locales. A veces en las tardes esto está vacío".
En uno de los clásicos de la gastronomía barranquina, la Fuente de Soda Juanita, el movimiento era incesante a la hora del almuerzo, pero el público es reducido. Menos mesas al interior del local de Barros Luco, casi esquina con El Molo, y un par de comensales en la vereda. A pesar que no está en su mejor momento, Olga Abarca apuesta por la recuperación luego de los meses difíciles que se vivieron. "Ojalá no retrocedamos", pide desde la caja del local.
"Ahora estamos bien, pero el nuestro ha sido un gremio muy afectado. Si seguimos igual podemos mejorar. Tenemos que vivir el presente, ahora estamos contentos y creemos que será favorable para todos", proyectó.
Y si bien la tradicional fuente de soda no atiende hasta altas horas de la noche, el retraso del toque de queda le permitió extender su horario. "Nos organizamos de acuerdo a la hora del toque de queda, cerrábamos a las 5 y media cuando era a las 22 horas. Ahora atendemos hasta las nueve de la noche. Entre que se va la gente y en hacer el aseo estamos hasta más tarde".
Olga Abarca admite que "el año pasado fue horrible, esperábamos mejorar, por como fue el verano, pero retrocedimos. Vamos para los dos años sin atender con continuidad. No nos podemos proyectar ni organizarnos si volvemos a retroceder".
La comerciante aseguró que "estoy feliz por toda la gente de nuestro rubro, porque podrán abrir más días y horas. Nos tenemos que cuidar para no retroceder, acá todos los que entran es con el pase de movilidad, o si no en la vereda".
En algunos establecimientos de la calle Antofagasta reclamaron por la prohibición de realizar espectáculos en vivo en algunos restaurantes.
Sin embargo, en este tipo de eventos, como conciertos o recitales, no se pueden consumir alimentos y se restringen los aforos, aunque pueden llegar a 1.000 personas con pase de movilidad en espacios abiertos.
"Los últimos meses han sido muy malos para nosotros. Somos el rubro más golpeado y eso de estar abriendo y cerrando nos ha perjudicado",
Jéssica Menares, del restaurante Huachano de Barrancas.
Bajan los casos
Solo seis casos de covid-19 se reportaron ayer en la provincia y todos los contagios corresponden a San Antonio. Después de nueve días, los infectados bajaron de la decena en la zona. Con los contagios informados ayer, la provincia llegó a 12.331 casos. Por comunas San Antonio suma 6.974, seguido por Cartagena (1.706), El Quisco (1.099), El Tabo (1.006), Algarrobo (866) y Santo Domingo (680). No se reportaron muertes en la provincia y el total de fallecidos es de 246.
12.331 casos de covid-19 se suman en la provincia de San Antonio en la pandemia.