Dramático rescate de jóvenes arrastrados por el oleaje en playa de Santo Domingo
Los amigos se bañaban en sector no habilitado al momento de la emergencia. Minutos de tensión se vivieron en el operativo de salvataje.
La Armada de Chile, a través de su equipo de emergencia marítima en San Antonio, respondió rápidamente al llamado de auxilio recibido desde la playa Rocas de Santo Domingo, donde se daba cuenta de dos jóvenes bañistas en peligro de inmersión.
Según informó a Diario El Líder el capitán de corbeta Sergio Sánchez Andrade, capitán de puerto subrogante de San Antonio, se recibió una alerta en la línea de emergencias marítimas 137 informando sobre dos personas que tenían dificultades para regresar a la orilla.
El capitán de puerto relató que "en el llamado que recibimos se informaba que en la playa Rocas de Santo Domingo había dos bañistas que no podían salir del agua hacia la playa, así que de forma inmediata se dio la orden de zarpe a la lancha rápida (LPM 4410) y al mismo tiempo se desplegó una patrulla de Policía Marítima vía terrestre hacia el lugar donde estaba ocurriendo la emergencia".
Rescate
"Tanto la lancha como la camioneta llegaron casi al mismo tiempo al sector de la playa, pero como las personas se encontraban demasiado cerca de la rompiente, la patrullera no podía acercarse tan cerca de la orilla por el riesgo a vararse", explicó el capitán Sánchez.
Con la llegada simultánea de los equipos de rescate marítimo de la Armada al lugar se determinó que, debido a las condiciones cercanas a la rompiente, la lancha no pudo aproximarse a uno de los jóvenes que permanecía en el mar y uno de los marinos, equipado con traje de agua, saltó desde la patrullera para nadar hacia el bañista que se encontraban a aproximadamente 50 o 60 metros de la playa.
En paralelo, los rescatistas constataron que, a la llegada de la patrulla naval, uno de los jóvenes, de 17 años, ya había logrado salir del agua con la ayuda de una pareja de carabineros y presentaba algunos signos de descompensación por lo que fue asistido por personas presentes en la playa.
"A pesar de las fuertes corrientes que dificultaban el rescate, nuestro personal logró llegar al lugar donde se encontraba el bañista y llevar a este joven hasta la playa, donde personal médico lo atendió y confirmó que se encontraba en buenas condiciones", explicó el capitán Sergio Sánchez Andrade.
Los dos jóvenes, ambos residentes locales, fueron auxiliados en la misma playa. El de 17 años fue trasladado al Servicio de Atención Primaria de Urgencia (Sapu) de Santo Domingo para su evaluación. Por su parte, el joven de 18 años, tras ser revisado y estabilizado, se retiró por sus propios medios.
Los hechos
"Lo que pasó es que los cabros habían entrado al agua y el más chico no podía salir, ahí se metió el amigo más grande a tratar de sacarlo y quedaron los dos atrapados por las olas sin poder salir. Ahí fue que se dio aviso a los marinos, a carabineros y todos los equipos de emergencia que llegaron a los pocos minutos. Al primero lo ayudaron a salir unos carabineros y al otro muchacho lo rescataron los marinos que llegaron en la camioneta, porque llegaron súper rápido y bien equipados", comentó un testigo de los dramáticos momentos que se vivieron por la tarde del lunes en la playa de Santo Domingo.
Playas no habilitadas
El capitán de puerto (s) de San Antonio aprovechó esta contingencia para hacer un llamado a la ciudadanía a actuar con responsabilidad y no tener conductas temerarias en las playas de la zona.
"Exhortamos a la comunidad a no arriesgarse en zonas no habilitadas para el baño. La temporada estival aún no comienza y, aunque en algunas playas se habilitarán medidas de seguridad, se debe evitar el ingreso a sectores peligrosos", enfatizó la autoridad marítima.
"Nuestro personal logró llegar al lugar donde se encontraba el bañista y llevar a este joven hasta la playa",
Sergio Sánchez,, capitán de puerto San Antonio
"El más chico no podía salir, ahí se metió el amigo más grande a tratar de sacarlo y quedaron los dos atrapados por las olas sin poder salir",
testigo del rescate