David Muñoz Castillo
Si las personas no van a las vacunas, las vacunas se acercan a las personas. Así se podría resumir el objetivo de la nueva estrategia de vacunación que implementa la autoridad sanitaria en los territorios comunales.
Ayer debutó en San Antonio el vacunatorio móvil y se instaló en una feria libre de Llolleo alto.
En la esquina de Domingo García Huidobro con el pasaje Parinacota, un móvil de la Seremi de Salud, con personal del consultorio Néstor Fernández Thomas, vacunó a los vecinos del sector con fármacos contra el covid-19 y también para combatir la influenza.
Entre Pfizer y Sinovac, en la jornada de debut de la iniciativa se inocularon 265 personas con primeras dosis para los niños de 15 años y segundas para los más grandes.
El seremi de Salud, Georg Hübner, explicó sobre esta estrategia que "los vacunatorios móviles más pequeños se desplazan a los sectores de la población que tienen mayor dificultad de acceso. Esto ha sido bien recibido por las personas más vulnerables para tener más cobertura".
El jefe de la Dirección de Salud Municipal de San Antonio, José Luis Hernández, agregó que "este es un recurso que se obtiene vía Seremi, de hecho, el vehículo es de la Seremi con su equipamiento y su conductor, y nosotros como Dirección de Salud aportamos con el personal que permite hacer funcionar el vacunatorio".
El odontólogo anunció que el vacunatorio móvil estará en San Antonio los días miércoles y viernes. Excepcionalmente, esta semana funcionará el jueves, ya que mañana es feriado. "Esperamos solicitar más días y mientras se conozca esta estrategia en la comunidad tendrá más demanda. Queremos llegar a los barrios, a los sectores que les cuesta más llegar a los puntos céntricos de la ciudad".
El jefe de la atención primaria de salud sanantonina dijo que "el objetivo es acercar la vacunación a la comunidad y que no tenga que hacer esas largas colas que hemos visto en el punto de vacunación o en algunos Cesfam, sobre todo porque bajamos en edad".
Los nuevos grupos que se vacunan, por el calendario del Minsal, fomentan las aglomeraciones. "Hoy (ayer) partimos con los 15 años y son menores de edad. Por lo tanto, sí o sí tienen que acercarse a los puntos de vacunación acompañados de alguien responsable, que actúe como su tutor. Entonces ya son dos personas las que se movilizan para adquirir vacunas".
José Luis Hernández aseguró que "queremos vacunar a la mayor cantidad de personas en el menor tiempo posible".
La directora del Cesfam Néstor Fernández Thomas, Lilian Velásquez, detalló que ayer se entregaron "vacunas de segundas dosis para el coronavirus (Pfizer y Sinovac), primeras dosis para los niños de 15 años y personas con enfermedades crónicas de 12 a 17 años. Mañana (hoy) estaremos en la calle El Sauce, pero solo con vacunas de influenza".
La funcionaria de la salud municipal aseveró que "hemos tenido buena aceptación de la población, llegó mucha gente, porque algunos no se pueden desplazar al liceo Fiscal o a Casanova, donde estamos funcionando".
Para poner en marcha este vacunatorio móvil, ocho funcionarios del Cesfam se abocaron a la tarea: un médico, dos enfermeras, dos paramédicos, dos asistentes sociales y la directora del Cesfam llolleíno.
Valery Rojas (15) ayer fue una de las personas que se vacunaron en la feria llolleína, motivada por su mamá, quien la acompañó en el proceso. "Como me quedaba cerca de la casa vine, además que vivo con personas mayores", comentó la niña.
Constanza Valenzuela explicó que fue al vacunatorio móvil porque "vivo cerca, entonces es más fácil venir acá que bajar al consultorio. Es mejor para todos, incluso acá fue más rápido. Me demoré 15 minutos y en la primera dosis dos horas y media", contó
"Es responsabilidad de todos vacunarnos y pronto", recomendó la joven de 25 años sobre el proceso de inoculación.