Mónica Jorquera Escobar
En 2013 un vecino de cerro Alegre fue condenado a pasar ocho años en la cárcel por disparar reiteradas veces en contra de carabineros utilizando un arma "hechiza". Desde el día en que se dictó la sentencia se le perdió el rastro, hasta esta semana.
Carabineros de la Tercera Comisaría de Algarrobo se encontraban efectuando funciones preventivas en el centro de la comuna cuando fiscalizaron a un camión de Coca-Cola que repartía bebidas. Al solicitarle la cédula de identidad al peoneta descubrieron que se trataba de un prófugo de la justicia que había logrado evadir la cárcel por casi una década.
Michel C.C.S. fue condenado por el Tribunal Oral en Lo Penal a los 18 años. Ahora, con 26, recién ingresó al Centro de cumplimiento Penitenciario de San Antonio a cumplir su condena.
Caso
El sanantonino fue detenido el 12 de septiembre de 2013 en medio de manifestaciones que se realizaron en el marco del 11 de septiembre. Carabineros de la Primera Comisaría llegaron hasta calle Manuel Montt de cerro Alegre a verificar unas barricadas que se habían levantado en el lugar cuando fueron atacados a balazos.
En el juicio desarrollado en julio de 2014, el Ministerio Público presentó pruebas con las que se acreditó que Michel C.C.S. "utilizando un arma de fabricación artesanal, consistente en dos tubos metálicos, efectúa disparos en contra del personal policial, alcanzando a impactar al vehículo en que se trasladaban, específicamente la máscara, capot y puerta delantera costado izquierdo, provocando daños en su estructura", dice el fallo redactado en 2014.
El documento agrega que "personal policial desciende del vehículo con el propósito de lograr la detención de los imputados, iniciándose una persecución, donde Michel C.C.S. efectúa un disparo en dirección hacia los funcionarios de Carabineros sin lograr impactarlos".
Por ello, el TOP determinó condenar al involucrado a cinco años y un día como autor del delito de homicidio tentado en contra de funcionarios de carabineros de servicio y a otros tres años y un día por el ilícito de porte ilegal de arma prohibida.
Para llegar a esa determinación, el tribunal razonó que "el delito de porte de arma de fuego prohibida se encuentra consumado (…). En tanto, en relación con el delito de homicidio (tentado), el acusado dio inicio a la acción delictiva de dar muerte, a la que faltó una acción adicional como era apuntar de forma precisa a los funcionarios que lo perseguían".
El imputado se mantenía en libertad al momento de desarrollarse el juicio en su contra, y tras la sentencia nunca se presentó a cumplir con su condena. Este miércoles fue dirigido hasta la cárcel local en calidad de rematado.
Eso sí, la defensa solicitó una audiencia de revisión de prescripción del delito, puesto que al transcurrir ocho años desde la sentencia está cerca de que la pena se dé por cumplida.
26 años tiene ahora el joven que fue condenado en 2013 a ocho años de presidio por ataque armando a carabineros.