Un hombre de 35 años falleció cuando trataba de defender a dos adolescentes que estaban siendo asaltados en un skatepark de la comuna de Lo Espejo.

El hecho ocurrió cerca de las 14.00 horas del jueves cuando los jóvenes fueron abordados por un delincuente que con arma en mano los intimidó para robarles sus pertenencias. El atraco fue visto por Rodrigo Fernández, quien estaba a unos metros del lugar retirando su vehículo de un taller mecánico.

Al detectar el asalto, el hombre corrió en socorro de los adolescentes, enfrascándose en una riña con el ladrón, quien usó su arma. Vecinos aseguran haber oído entre seis y siete tiros. Al menos cuatro de ellos impactaron en el tórax al defensor.

Tras recibir primeros auxilios de vecinos fue trasladado en ambulancia al Hospital Barros Luco, pero murió en el trayecto.

"Hizo algo bueno antes de partir", comentó su hermana Betsabé al canal Mega. "Él era así, no era cobarde. Si tenía que ayudar a alguien, siempre tenía buena disposición con todo el mundo", añadió.

La víctima es padre de cuatro hijos menores y su hermana lo definió como una persona "alegre, servicial" y que "siempre andaba con el chiste".

"Esto es una pesadilla", manifestó, junto con pedir justicia por su muerte. "Por favor que la justicia se ponga los pantalones y de una vez por todas a estos gallos los tomen presos", dijo. Hasta ayer no habían detenidos.

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Diego Gotelli C.

A rostro cubierto y de madrugada, un grupo indeterminado de personas ingresó ayer a dependencias de la Universidad de Concepción para perpetruar un ataque incendiario en la casa de estudios del Biobío.

Según el comandante Joel Ríos, comisario de la Primera Comisaría de Concepción, los sujetos rociaron líquido acelerante, prendiendo fuego a dos vehículos estacionados fuera de la Facultad de Ciencias Forestales, uno de los cuales quedó con pérdida total. Las llamas también afectaron el frontis y el primer piso de la facultad, lo que llevó a suspender las actividades académicas.

Para ingresar al recinto, a eso de las 5.30 horas, los encapuchados intimidaron a los guardias de seguridad, presuntamente con armas de fuego, según dijeron desde la policía. El rector Carlos Saavedra aseguró que hubo disparos contra el personal, aunque el ataque no dejó heridos.

Horas más tarde, en un camino aledaño a la facultad, personas que hacen trekking en el cerro denunciaron la de unas especies de "trampas" hechas con púas que estaban cubiertas con ramas y piedras.

"Obviamente esto es un atentado (...). No tengo explicación para este acto, desconozco las razones y las motivaciones. Uno puede elucubrar, pero la verdad es que nunca hemos tenido un problema de este tipo, entonces no sabemos a qué se debe", dijo el decano de la facultad, Manuel Sánchez.

En el lugar se halló un lienzo en el que se exige la "desmilitarización" de la macrozona y se conmemoró "en las llamas del sabotaje" la muerte de Pablo Marchant, integrante de la Coordinadora Arauco Malleco y que fue estudiante de la U penquista.

La pancarta también llama a la casa de estudios como "sapa de la Fiscalía", acusación que se da en medio de una querella que mantiene contra 12 imputados por destrozos al interior del campus durante el estallido social. El martes pasado estudiantes se tomaron dependencias de la rectoría exigiendo el retiro de la acción penal.

En aquella ocasión desde la oficina del rector afirmaron en un comunicado estar abiertos al diálogo, pero consideraron "en extremo injusto que en febrero de 2020 nuestra institución y comunidad hayan sido fuertemente agredidas en más de 10 oportunidades y hoy la misma casa de estudios vuelva a padecer un acto irracional como forma de resolver este conflicto".

Para indagar el nuevo hecho ayer se constituyó en la escena el fiscal exclusivo para causas de violencia rural en el Biobío, Juan Yáñez. Hasta anoche no habían detenidos por el ataque incendiario.

"Es un atentado y no sabemos a qué se debe. No tengo explicación. Nunca hemos tenido un problema de este tipo",

decano Manuel Sánchez.